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Cuatro de los veinte equipos del grupo cuarto de la Segunda
‘B’ cambiaron de entrenador en las primeras 17 jornadas de
Liga. El Cerro Reyes Atlético, el CD Villanueva y el filial
del Málaga buscaron con el relevo en el banquillo la
reacción de tres equipos ubicados en el fondo de la tabla.
El caso de la UD Marbella es totalmente distinto, porque el
club marbellí está realizando una espléndida temporada y se
quedó sin Juan Ramón López Muñiz al marcharse el asturiano
al Málaga, donde Fernando Sanz pensó en el entrenador del
Marbella como el recambio idóneo de Marcos Alonso. El club
costasoleño no deseaba desprenderse de Muñiz al que había
firmado en la parte final del curso pasado, pero éste no
quería desaprovechar la oportunidad de ‘estrenarse’ en
Segunda División y forzó a los clubes implicados para que se
pusieran de acuerdo. El Marbella debió pensar que donde las
dan las toman y le ‘quitó’ a la Gimnástica Segoviana a su
entrenador al fichar a Antolín Gonzalo. El equipo que
preside Antonio Pérez Ramos no se ha resentido y cerrará el
año en la quinta posición con 30 puntos, los mimos que suma
el Cartagena.
En el Cerro Reyes García Tébar sustituyó a Paco Miranda, que
presentó la dimisión por la falta de sintonía con el club,
en el Málaga ‘B’ los malos resultados se llevaron por
delante al argentino Mario Husillos asumiendo la dirección
técnica el ex jugador de la Agrupación Juan Carlos Añón, un
hombre de la casa que ya había entrenado al filial
malaguista en Segunda ‘A’ y en Villanueva la etapa de
Antonio Gutiérrez pasó a mejor vida haciéndose cargo del
equipo jarote Rafa Carrasco, que no ha logrado revertir la
situación.
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fútbol / segunda divisiÓn ‘B’,
GRUPO ‘IV’
