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El Liceo Ceuta superó de manera contundente (4-1) en el
Díaz-Flor a un Hispanidad de Huelva que no tuvo opciones
ante unas jugadoras caballas que se juegan todo la temporada
en sus tres últimos partidos.
El primero, el de ayer, fue superado sin problemas por María
Reyes, Almudena Roldán y Cristina Marín, que demostraron que
están dispuestas a luchar hasta el último partido para tener
posibilidades de pasar directamente a División de Honor.
La infantil y las seniors deberán ahora enfrentarse, dentro
de dos semanas, a un Villafranca con el que sólo vale ganar,
y a un Los Almendros, que son los actuales colistas del
grupo, condenados ya al descenso.
Sin lugar a dudas el partido clave para las jugadoras del
equipo caballa será el que las enfrente, el próximo 24 de
marzo, a domicilio con las cordobeses, con las que ya
cayeron en la pista del polideportivo Díaz-Flor en la
primera vuelta. El Villafranca, con dos puntos más que el
Liceo le valdría la victoria para asegurarse la segunda
plaza de la tabla, ocurriese lo que ocurriese al día
siguiente en tierras extremeñas entre las ceutíes y Los
Almendros en el último partido de la temporada.
Sin embargo, y si el Liceo supera a las cordobesas en este
primer encuentro de su doble salida, tendría muy cerca el
segundo puesto del grupo ‘IV’ de Primera Nacional Femenina,
puesto que Los Almendros sería un rival a priori asequible
como colofón final a una gran temporada.
En el caso de que María Reyes, Almudena y Cristina cayesen
el ciudad cordobesa, aún tendrían opción de ascender a
División de Honor tras superar una liguilla que, si tuviera
que disputarse, la Federación de Tenis de Mesa de Ceuta
intentaría que se disputase en tierras caballas. De momento
el primer envite, superado.
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