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El taxi es el vehículo más utilizado por los trabajadores
marroquíes para desplazarse desde ciudades como Tetuán,
Castillejos, Rincón o Martil hacia Ceuta.
Alrededor de 10.000 personas cruzan diariamente el paso
fronterizo del Tarajal para trabajar en la Ciudad Autónoma.
La huelga de taxis iniciada el pasado martes por los
trabajadores marroquíes, puede traer grandes consecuencias
económicas a la ciudad si se continúan con ella, ya que los
trabajadores y comerciantes de la zona se ven con grandes
dificultades para llegar hasta la frontera.
Las causas de este parón en el sector del taxi se deben
principalmente a la aplicación de una polémica regulación
que obliga a los taxistas y a sus ocupantes a colocarse el
cinturón de seguridad.
“Nuestros vehículos tienen sólo cuatro o cinco cinturones de
seguridad, mientras que montamos en cada viaje llevamos a
seis o siete personas. No podemos cumplir con esta
regulación”, explicó un taxista fronterizo.
Ante esta situación, la solución radicaría simplemente en
que los taxistas dejaran de sobrepasar la ocupación de
plazas de sus vehículos, pero el trabajador lo tiene muy
claro. “Nuestro transporte es el más popular y utilizado de
Marruecos porque es muy barato. El trayecto desde Tetuán
hasta Ceuta, que suponen unos 75 kilómetros, le cuesta a
cada viajero poco más de un euros, viajando seis personas en
el coche más el conductor, si recortamos las plazas a lo que
establece la ley, podría llevar sólo a cuatro pasajeros lo
que encarecería enormemente el viaje y provocaría que a los
propios trabajadores no les saliera rentable desplazarse
hasta la frontera”, añadió el taxista.
El recorrido desde Tetuán hasta el paso fronterizo es uno de
los que recibe más número de pasajeros a diario. En el día
de ayer, fue precisamente este trayecto el que careció de
servicio. El pasado martes comenzó esta huelga que afectó a
otros transportes públicos como el servicio de autobús. En
la mañana de ayer los taxistas que realizan el recorrido
desde Castillejos hasta la frontera reiniciaron sus
servicios, pero aseguran que si no se anula la aplicación de
este reglamente sobre el cinturón de seguridad, podrían
reanudar el parón en los próximos días. Los taxistas del
servicio hasta Tetuán, sin embargo, continuarán en huelga ya
que al ser un recorrido muy amplío, de más de 75 kilómetros,
el riesgo a ser multados es mucho mayor.
“Las multas según nos han comentado en la Comisaría,
ascenderían a unos 400 dirhams,(40 euros), que tendría que
abonar el dueño del taxi, pero nuestros patrones se lavan
las manos, por lo que tendríamos que pagar los propios
conductores las multas y con nuestros sueldos esto es
verdaderamente imposible”, indicó el taxista.
La polémica está servida, si como bien barajan los
conductores, esta regulación sólo se llegue a aplicar en la
zona del paso hacia Ceuta y no en el resto del país.
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reportaje / problemática
fronteriza
