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Además de por los sentimientos de
terruño, propios de los que aman la tierra que les vio nacer
o que eligieron para vivir, de Ceuta podemos enorgullecernos
de estar a la cabeza en la gestión administrativa de
determinadas áreas de las consideradas como de servicio
público.
Si bien, poco a poco y no con pocos esfuerzos, se va
consiguiendo estar a la altura de la media en prestación de
servicios públicos en el ámbito de lo autonómico [aún queda
bastante por andar], podemos afirmar con rotundidad que
Ceuta es pionera en la implantación del sistema de
microchips y control sanitario preventivo en animales de
compañía; lo es también, y marca pautas que siguen otras
comunidades, en el control de la vacunación infantil. Son
hechos y realidades que, aparentemente, nadie ve pero que
están ahí.
La atención a la llamada tercera edad, a través de los
servicios de Bienestar Social es incuestionable. Ceuta se ha
preocupado de manera constante por sus mayores. Y lo ha
hecho [lo sigue haciendo] manteniendo activa la ilusión en
base a múltiples actividades, exitosas todas ellas.
La Ciudad Autónoma se ha vuelto a llevar a más de 350
mayores de viaje veraniego [9 días y 8 noches] al sempiterno
centro neurálgico del turismo de la Costa del Sol,
Torremolinos. El Centro de Servicios Sociales ha movilizado,
corriendo con todos los gastos, a un abultado número de
ceutíes, con un amplísimo programa de actividades gestionado
por una empresa líder en el segmento turístico de Ceuta.
Es pues un ejemplo claro de prestación de servicio y de
atención a los mayores. La consejera, Yolanda Bel estuvo en
primera línea en la Aldea del Rocío durante la jornada de
ayer y participó activamente del programa previsto. Pasado
mañana jueves, el presidente de la Ciudad, como ya es
costumbre en él, compartirá una cena de gala con los
excursionistas.
Es posible que aún falten elementos a Ceuta para erigirse en
ciudad ‘puntera’ en los ámbitos de la prestación de servicio
público, pero es incuestionable que el modelo de gestión
administrativa en el que destaca, tiende a ser imitado por
las demás comunidades autónomas... y esto, además de por los
sentimientos propios del amor a la tierra, produce una
notable sensación añadida de orgullo.
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OPINIÓN / EDITORIAL
