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Incertidumbre es la palabra que mejor define la impresión
del Gobierno ceutí ante la sustitución de varios ministros,
según anunció ayer el propio presidente del Gobierno, José
Luis Rodríguez Zapatero. Tres miembros del equipo del
Ejecutivo que han sufrido un cambio han pasado recientemente
por Ceuta, María Antonia Trujillo, ex ministra de Vivienda,
Elena Salgado ex titular de Sanidad que pasa a sustituir a
Jordi Sevilla, ex ministro de Administraciones Públicas
(MAP). Y es aquí donde la portavoz del Gobierno ceutí,
Yolanda Bel, se paró ayer a la hora de hacer referencia a la
postura oficial de la Ciudad. “El MAP tenía que dar una
respuesta determinada ya sobre unos convenios que tenemos
que terminar de formalizar. Esperemos que lo único que haya,
sea un cambio sobre papel y que las conversaciones y los
compromisos que habían por parte del MAP con nuestra ciudad
sigan adelante y se agilicen”, apuntó.
“Un punto y seguido” en las relaciones entre el Ministerio
de Administraciones Públicas y la Ciudad Autónoma, ése fue
el deseo ayer de la portavoz del Gobierno, quien insistió en
señalar que las relaciones son “fluidas” con la
Administración General del Estado independientemente de
quién encabece ahora cada uno de los Ministerios. “Los
nuevos ministros seguirán contando con una actitud leal por
parte del Gobierno de la Ciudad, con una postura de
colaboración como siempre ha sido”, expuso.
Tanto Yolanda Bel como el vicepresidente de la Ciudad
Autónoma, Pedro Gordillo coincidieron ayer a la hora de
dejar de lado las valoraciones sobre los cargos y los
nombramientos específicos de las nuevas carteras
ministeriales, ya que entienden que concierne exclusivamente
al presidente del Gobierno.
Gordillo, sin entrar en polémica, sólo aludió al hecho de
que los plazos para ratificar el convenio con el MAP se
había cumplido y que este cambio de titular “quizás retrase
un poco el trabajo”.
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