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“Encantado de la vida”. Así se sentía ayer David Bisbal
(Almería, 1974), en su primera visita a Ceuta. Una hora
antes del concierto, un tipo campechano y dicharachero
atendió a los medios de comunicación en el interior de las
Murallas Reales. Su sorpresa por el lugar elegido para la
presentación de ‘Premonición’ en la ciudad autónoma fue
mayúscula. “Tengo ganas de levantarme y que se haga ya de
noche para contemplar la belleza de este emplazamiento que
es una maravilla. Este tipo de recintos te dan la magia”
arrancó el más triunfador de la factoría ‘O.T’.
Con un nuevo disco bajo el brazo del que ha vendido cerca de
un millón de discos, dijo no tener problemas con el índice
de público [Estimadas 4.000 personas]. “A mi el número me da
igual. Cuando la gente va a verte a un concierto, va con la
misma energía para disfrutar de la música. Es algo que
aprendí hace mucho tiempo. Al principio con la orquesta
‘Expresiones’ tenía que cantar para dos personas. La magia
no esta en las personas que vienen sino en lo que quieras
expresar”.
Números aparte, la actuación de Bisbal formaba parte de la
Semana de la Juventud local, por ello, hizo un llamamiento a
la vida sana, el deporte y la música, sobre todo, la música
que, para él, es “una de las cosas más sanas que hay. Una
medicina que dibuja sonrisas y es el lenguaje universal”. El
almeriense aprovechó también para recordar que antes era él
quien se iba “de discoteca en discoteca y ahora la música la
pongo yo”, ironizó.
Esa música es precisamente lo que le trajo ayer a la ciudad
para ofrecer un repertorio “muy variado y muy ameno”.
Repartido, “al 50%”, entre temas rápidos y baladas. No
obstante, reconoció un mayor protagonismo al último disco al
explicar que ha “rescatado los sonidos más de banda porque
suena mejor en directo. El 70% de las canciones han sido
singles y así la gente las reconoce enseguida”.
Para su último disco, ha trabajado con cinco productores.
“He conseguido un sonido mucho más internacional, y he
podido expresar lo que sentía al estar en todo el proceso.
Un trabajo muy bonito con nuestras raíces y nuestra
esencia”, analizó de un álbum en el que está incluido uno de
sus temas más conocidos: ‘Torre de Babel’.
Con seis años en la cresta de la ola de los super ventas,
asegura haberse acostumbrado a estar tan arriba porque la
música es “una protección” para un artista que tiene entre
sus sueños actuar con Alejandro Sanz o los americanos
Beyonce y Black Eyed Peas. “Ojalá algún día”, dijo sobre
esta idea y ante la posibilidad de grabar un videoclip en
las Murallas. “Porqué no. Nunca había cantado en un recinto
así”, insistió como despedida, no sin antes posar ante las
cámaras al clásico grito de “increíble” y “vámonos, fiera”.
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david bisbal
