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Los grupos ecologistas y algunos representantes políticos se
movilizaron hace unos meses con el objetivo de crear una
plataforma contra el proyecto de incineradora que asoma
desde que se introdujera su instalación en el borrador del
Plan Nacional de Residuos. La presidenta de Pueblo de San
Antonio, Mercedes Galdón, acudió a la reunión como
“invitada” para informarse sobre la motivación de los
promotores de esta iniciativa. Algo escéptica, Galdón se
decidió solicitar información por escrito a la Consejería y
al Ministerio de Medio Ambiente sobre la ubicación de la
futura planta de tratamiento. Hasta el momento no ha
recibido respuesta.
Agosto es un mes inhábil para la Administración pero también
para las asociaciones vecinales. Por ello, Galdón asegura
que trasladará a los vecinos que “pueden pararlo y hacer
algo” en septiembre. Ahora sólo espera reaccionen en
consecuencia para que puedan llevar a cabo algún tipo de
movilización si fuera necesario.
La presidenta de Pueblo de San Antonio reiteró su
preocupación por la implantación de una serie de
instalaciones dirigidas a actividades insalubres “muy
cercanas” a sus casas, como es el crematorio de animales o
la controvertida Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR).
Mostró sus dudas a la hora de asegurar que el paquete de
medidas a las que se comprometió la Consejería de Medio
Ambiente para controlar las emisiones y los olores se vayan
a realizar. “La responsable del proyecto de la Estación
Depuradora, Rocío Rodríguez, nos dejó caer en la última
reunión que mantuvimos que la monitorización continua no
tenía mucho sentido. Sólamente pedimos una única cosa que
nos parece razonable”, sostiene Galdón.
De hecho, la presidenta de esta asociación vecinal cree que
la batalla contra la implantación de la EDAR en esa zona “no
ha terminado” porque, en su opinión, los vecinos responderán
ante los olores y los insectos que traerá hacia esa zona la
depuración de las aguas residuales.
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medio ambiente / incineradora
