PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura

Opinión
Archivo
Especiales  

 

 

OPINIÓN - LUNES, 27 DE AGOSTO DE 2007

 
OPINIÓN / EDITORIAL

Pragmatismo estatutario

El Gobierno que preside Juan Vivas insistirá en su voluntad de mejorar el régimen de autogobierno local aunque no consiga, tal como pretende, elevar el rango institucional de Ceuta al de Comunidad Autónoma. Este ‘detalle’, al que el líder del PP se ha referido como el aspecto “más llamativo” del proceso de reforma, pero no el único, ha ocupado decenas de informaciones durante los últimos tres años en los medios de comunicación local. Sin embargo, el Ejecutivo autonómico ha decidido poner la reforma estatutaria en claro y dejar bien claro que con la redacción de un nuevo Estatuto de Autonomía no se pretende sólo un cambio de nomenclatura oficial, sino garantizar el encaje de Ceuta en las estructura del Estado y, sobre todo, mejorar los servicios y la atención al ciudadano.

La Ciudad acierta al reconocer que ser Comunidad Autónoma es un objetivo “muy relevante” en términos políticos para acabar con esa disfunción histórica que arrastra Ceuta y ser “iguales al resto de las autonomías”, pero sobre todo es plausible su pragmatismo: si, por ‘razones de Estado’ o cualesquiera otras no es posible en este momento el cambio del estatus jurídico, este obstáculo no debe impedir que se acometa el proceso de reforma en las partes del Estatuto que sea “posible y conveniente modificar”.

Por encima de todas ellas responde el deseo del Gobierno del PP de que en el Estatuto se reconozcan determinadas medidas e instrumentos de índole fiscal y económico, entre otros, para hacer frente a los efectos que el hecho fronterizo tiene sobre la ciudad y sus posibilidades de desarrollo económico.

Es más importante que la Administración General del Estado nos trate efectivamente a Ceuta como al resto del país y se preocupe porque la ciudad pueda vencer las dificultades que le reporta su idiosincrasia, sus condicionantes geopolíticos y demás particularidades. Por eso es fundamental que el del Estatuto, más que un gran envite político, sea la construcción de una herramienta de verdadera utilidad.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto