PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura

Opinión
Archivo
Especiales  

 

 

OPINIÓN - SÁBADO, 15 DE SEPTIEMBRE DE 2007

 

OPINIÓN / SNIPER

Un aviso del Cielo
 


José Luis Navazo
jlnavazo@telefonica.net
 

Dos comunidades con notorio arraigo en esta ciudad (una bimilenaria, la hebrea y otra, la musulmana, de más reciente entrada en la historia) están de enhorabuena estos días. El miércoles el mundo judío celebró el “Rosh Hashaná”, nada menos que 5768 años de vibrante historia: desde Ur de Caldea a Eretz Israel, pasando después del rodillo de las legiones romanas de Tito (70 de la Era Común) y hasta el 14 de mayo de 1.948 por el paréntesis de la diáspora. La “Umma” por su parte y siguiendo las directrices de su libro sagrado, El Corán, dio comienzo ayer en el Magreb (a excepción de Libia, el coronel Gadafi siempre marca su impronta) al sagrado mes de Ramadán, debidamente glosado como no podía ser menos ayer mismo en “El Pueblo”, pues por circunstancias que no vienen al caso la comunidad musulmana supera ya, de hecho, el 50% de los efectivos demográficos de Ceuta, ciudad querida. A las puertas de la provisional redacción de este medio tuve ocasión, ayer hacia las 14.00, de intercambiar un saluda y un mutuo deseo de paz y felicidad con Larbi Mateis, singular líder de una controvertida corriente ideológica, “El Tabligh”, en boga entre muchos musulmanes ceutíes, quedando por ambas partes con la sana intención de encontrarnos un día de estos para charlar, en paz y tranquilidad, sobre asuntos de interés común. No era el momento de comentar a mi interlocutor la curiosísima ‘Carta al Director” publicada en el mismo día y en otro medio escrito de Ceuta por Abselam Hamadi, presidente de la Comunidad “Al Bujari” y en la que pasaba revista a los comentarios de un aguerrido discípulo de “sidi” Mateis, además de al que esto suscribe. Hombre, en fechas tan señaladas como éstas yo entiendo que los musulmanes de la ciudad deberían dejar aparcadas sus rencillas y dedicarse a lo suyo, al rezo, al estudio de los textos, la petición de la “baraka” y a preparar, por las noches, sabrosas y nutritivas “hareras” con sus noventa componentes, pues estamos en un mes sagrado y noventa son los sagrados nombres de Alá/Dios.

Cruzado El Tarajal, Tetuán y sus alrededores estaban tranquilos, expectantes, esperando el ocaso y la celebración del primer “desayuno” de Ramadán. En calles y tramos de carreteras brigadas de operarios se afanaban por despejar las toneladas de lodo y residuos que embarraban el asfalto, drenando también zonas bajas que habían quedado anegadas tras las trombas de agua caídas estos días y que, lamentablemente, se llevaron al menos dos vidas (un profesor fulminado por un rayo y una niña) en la zona de Xauen.

Sin duda puede haber, como en Ceuta, algunos problemas de ordenación urbana pero, desatadas, las fuerzas de la naturaleza son imposibles de encauzar, pese al brillante trabajo desarrollado en la Ciudad Autónoma por los bomberos y fuerzas de seguridad. Si Alí Lemague (político ceutí de pro y a la vez con pasaporte marroquí) viviera como yo en Marruecos, a quién iba a reprocharles la anegación de campos y calles?; ¿al Rey Mohamed VI…?. Mira que sobran casos en Ceuta donde morderle hasta la yugular al “Gobiernín” de mi querido y respetado Juan Vivas, pero Lemague y su gente de la UDCE-IU prefieren, a lo que parece, jugar a la oposición con la inclemente meteorología de 1.400 litros por m2 y los designios de Dios.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto