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España mantiene en el país el nivel 2 de alerta terrorista,
situación que en Ceuta se traduce como un despliegue de
operativos, a veces insuficientes, aunque compensado con la
labor personal de los profesionales de la seguridad en
nuestra ciudad. Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad mantienen
especial vigilancia en la ciudad autónoma. Los servicios de
información tanto de la Guardia Civil como de la Policía
Nacional contribuyen a la seguridad de la ciudad. Son los
que no se ven. Son difíciles de apreciar, pero se encuentran
operativos al cien por cien y controlan cualquier situación
sospechosa que deba ser seguida y vigilada. En Ceuta, hasta
la fecha, después de la última operación, la ‘Duna’
capitaneada por el juez Garzón, no se tendría conocimiento
de actividades sospechosas de entornos yihadistas.
Marruecos
Por otro lado, se encuentra la frontera y la actividad
policial marroquí contra el activismo radical que amenaza
seriamente la estabilidad en Marruecos. El nombramiento del
destacado miembro del partido nacionalista Istiqlal, El
Bassi, como primer ministro de Mohamed VI, provoca una
contradicción: se encontrará con que tendrá que enfrentarse
a este activismo islamista, aunque en esencia, el nuevo
premier piense lo mismo según la filosofía nacionalista del
Istiqlal, su formación política.
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