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OPINIÓN - MIÉRCOLES, 31 DE OCTUBRE DE 2007

 

OPINIÓN / PERSONAL Y TRANSFERIBLE

Posado de una militar
 


Domingo Ramos
domingoramos@elpueblodeceuta.com

 

Se están dando tantas cosas raras, que ya ni nos llama la atención que Pilar Pacheco, chica que presta sus servicio militar como soldado profesional en Ceuta, se haya destapado, o mejor dicho, posado casi desnuda para la revista Interviú (solo con unas pequeñas braguitas y sin sujetador), emulando a muchas de las “espesas” que han pasado por la Galería de la Zona Caliente de dicha revista como las Aída Nízar, Belén Esteban o Carmen Janeiro, por poner unos ejemplos.

Pero a lo que vamos: tiene que ser un numerito, como aquellos que nos montaban en nuestros tiempos del servicio militar obligatorio, cuando llegado el día de celebración de la Patrona del Cuerpo, nos obsequiaban, aparte de la comida extraordinaria, con un espectáculo en el que aparecían chicas ligeritas de ropa que levantaban el ánimo y el caluroso aplauso de la concurrencia compuesta por la tropa y los mandos correspondientes. Y es que, señores, entonces, por citar algo anecdótico, el género femenino se bañaba en las playas con bañador de “cuerpo entero” y ver a una chica tan aliviada de vestuario era una verdadera diversión y mas entre tanta gente joven como la que forma un regimiento.

Y, a lo que vamos: Pilar Pacheco (nacida hace 26 años en Salamanca) ceutí de adopción por decisión unilateral de la misma que ha elegido nuestra Ciudad para desempeñar sus carrera de soldado profesional, ya ha obtenido un récord: ser la primera mujer soldado que se desnuda para una revista y cómo no, la sensación del cuartel en el que todos la felicitan por sus fotos e, inclusive, según cuenta, sus compañeros están “flipando” por disponer de una “colega” que ha comenzado a ser famosa y a la que quedan, ahora, los recorridos por las televisiones con programas “basura” a fin de que le lleven a cabo entrevistas y nuevos posados para general conocimiento y no solo de la tropa (a la que nos suponemos ofrecerá alguna que otra “actuación”). Por lo visto, se ha convertido en ley de vida el querer imitar a aquellas que por ser novias, compañeras o acompañantes de un famoso (léanse de Reyes y del Kum Agüero -Atlético Madrid-, Cayetano Rivera -torero-, Güiza -Real Mallorca- y, pasándonos a la política, María Dolores Jiménez -Concejala de Lepe por el Partido Popular-) o de ahora en adelante pertenecer al ejército, para disponer de varios espacios en el papel cuché, a toda plana, en color, en la revista de mayor difusión de todas las publicaciones semanales españolas.

Nosotros, que conocemos y disfrutamos de la amistad de muchos militares de alto, mediano o menor rango de los que nos consta su hombría y aunque la soldado Pilar Pacheco haya expresado su “satisfacción porque en el cuartel todo el mundo es respetado y tratado con cortesía militar”, nos hemos preguntado ¿no será un compromiso para cualquiera de sus jefes cuando esta chica se presente a los mismos, después de unos ejercicios de educación física, ligerita de ropa, diciéndole, por ejemplo: a sus órdenes mi capitán. (¡Qué ordenes le daré a ésta soldado, se preguntará el jefe, cuando le vengan a la memoria las fotos de los desnudos de la misma en Interviú)¡). Y es que, como se dice en estos casos, los militares no son de piedra, hombre…
 

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