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El presidente de Melilla, Juan José Imbroda, defendió ante
los Reyes la “inquebrantable” voluntad de la ciudad autónoma
de permanencia a España y destacó su “adhesión y lealtad a
la máxima encarnación” del país, “Don Juan Carlos y la
Corona”. Imbroda manifestó además el deseo de Melilla de
“vivir en paz y en libertad” y su voluntad de “mantener
relaciones de buena vecindad con su entorno próximo”.
Imbroda trasladó al monarca su “alegría” por este primera
visita, un hecho que calificó como “la página más
importante” en su historia contemporánea. “Y es que Melilla
siempre mantuvo, y mantendrá, unos vínculos históricos de
lealtad, cariño y respeto a la Corona”, aseveró. En este
contexto, defendió la necesidad mantener relaciones “de
buena vecindad” con su entorno próximo.
El presidente autonómico realizó también una serie de
peticiones al Rey, entre las que destacó su ruego porque el
monarca apoye a Melilla ante las Instituciones del Estado.
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