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Desde esta semana, la Policía Local de Ceuta estará más
preparada ante las situaciones extremas. Ese es el objetivo
del curso de formación ofrecido por UGT que comenzó el lunes
y finaliza hoy. Al curso han asistido 14 agentes del cuerpo
de seguridad y en él que se han simulado diversas
situaciones como ajustes de cuentas, redadas o conflictos
con violencia doméstica que en más de una ocasión están
sacados de la realidad.
Para preparar las escenas y enseñarles a reaccionar cuentan
con un equipo de dos instructores de ASP (defensa
extensiva), otros dos de tiro y un cámara que graba toda la
operación para analizarla más tarde y extraer los errores.
Según explica Fernando Robles, instructor de tiro, “se
pretende que los policías vean los efectos psicológicos que
provocan estos casos extremos en ellos mismos para que estén
preparados para la realidad”. Uno de estos efectos es el
denominado túnel, que se produce cuando ante una situación
de estrés, el agente pierde facultades como la visión
periférica o el oído.
Para hacer más real el simulacro se usa armamento de fogeo y
simunition, una munición especial realizada con bolas de
silicona que se usa para entrenamientos en EE.UU. y que
causa moratones e incluso pequeñas heridas al impactar. Sin
embargo, Robles aclara que “en todo momento utilizamos
medidas de seguridad como cascos”.
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