Las Hermandades comienzan a inaugurar sus tradicionales
belenes, y la primera en realizarlo este año ha sido la
Hermandad de la Flagelación, la cual ayer por la tarde
inauguró una magnífica recreación del nacimiento de Jesús
donde asistieron un gran número de hermanos así como el
presidente del Consejo de Hermandades y Cofradías de
Penitencia, Juan Jesús Bollit Beltrán.
El grupo joven de la Hermandad Sacramental y Cofradía de
Penitencia de Nuestro Padre Jesús de la Flagelación y María
Santísima de la Caridad presentó ayer a todos los ceutíes el
Belén de la Hermandad para estas fiestas navideñas.
A la presentación e inauguración asistieron un gran número
de hermanos, los cuales, tras la bendición del Belén
realizada por el director espiritual de la Hermandad, el
padre José Manuel González, se arrimaron hasta la recreación
para ver todos y cada uno de los minuciosos detalles del
mismo.
No en vano, tal y como destacaba a nuestro rotativo Emilio
Cardona, miembro del grupo joven de la Hermandad, cada casa
está realizada a mano en porexpan, recubierta de escayola y
pintadas a mano con acrílicos; todas las figuras son de los
escultores José Luis Mayo y Pedro Ramírez Pazos (las de éste
último realizadas a palillo, como es el caso del Misterio,
el cual está modelado en barro con palillo); las
construcciones han sido sacadas de libros como “Vida en
tiempos de Jesús” y “El taller de Belén”; toda la vegetación
es natural salvo las palmeras y las chumberas que están
realizadas a mano; y todos los ladrillos que aparecen en las
distintas construcciones están realizados uno a uno.
Emilio Cardona también destacaba que han sido necesarios
tres meses de trabajo desde que se comenzara a recoger toda
la documentación necesaria hasta que se terminó de poner la
última figura, pero este duro trabajo finalmente se ha visto
recompensado con la magnífica recreación del Nacimiento de
Jesús que han conseguido. Además de obserbar todos los
detalles, los asistentes, bajo los sones de los villancicos
más tradicionales, también pudieron degustar de exquisitos
roscos caseros y polvorones, así como refrescos para los más
jóvenes y el tradicional anís para los mayores.
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