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Un grupo de vecinos de la barriada de San Antonio
denunciaron la “peligrosidad” de un solar situado junto a la
carretera de subida a la ermita y muy cercana a las
viviendas. La presencia allí de gitanos y otros ocupantes ha
generado ya algún incendio, según apuntó uno de los
habitantes de la zona.
Los vecinos tienen “miedo” ya que se trata de una zona
boscosa y de matorrales y cualquier incendio, aunque mínimo,
podría llegar a sus viviendas dada la cercanía existente con
el solar.
Según indicaron, la parcela es de propiedad privada pero no
está vallada por lo que el acceso es libre. El dueño del
espacio tampoco hace acto de presencia a pesar de los
incidentes y del requerimiento vecinal, según explicaron.
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