PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura

Opinión
Archivo
Especiales  

 

 

OPINIÓN - DOMINGO, 23 DE DICIEMBRE DE 2007

 

OPINIÓN / MIS COSAS

Mis cosas
 


ADE
ade
@elpueblodeceuta.com
 

La falta de civismos que vive esta sociedad, se va agravando con el paso del tiempo sin que, al parecer, se puede poner freno a la misma.

Y esa falta de civismo, entre todos nosotros, sálvese el que pueda, nos ha llevado a la perdida del principio de autoridad, haciendo imperar la razón de la fuerza ante que la fuerza de la razón. Un gran problema, cada día más asentado, que habría que ir erradicando por el bien de todos.

La moda está en pegarle a los profesores, a los médicos o a las enfermeras y llegar a todas partes gritando para se atendido los primeros. No sé por qué razón se tiene la creencia de que, llegar a unas dependencias y ponerse a gritar, es lo que le da la razón a quienes ejecutan este sistema.

No hace muchos días, por esa fuerza que nos da la razón de las fuerzas, uno de estos actos volvió a producirse en el Ambulatorio José Lafont, donde una enfermera fue atacada por un paciente que no quería esperar su turno y, por supuesto, quería ser atendida la primera, sin tener en cuenta que cuantas personas se encontraban esperando ser atendidas, también eran personas enfermas que esperaban su turno.

Nadie, absolutamente nadie, va a un ambulatorio por el placer de sentarse y que el médico lo vea. Se va por la sencilla razón de que se necesita ayuda médica que alivie sus males. Ninguno queremos estar enfermos y, mucho menos, ir al ambulatorio que nos corresponda a perder el tiempo, esperado ser atendidos.

Al parecer hay quienes tienen la creencia, de que la solución para pasar el primero está en atacar al médico o a la enfermera de turno que sólo cumplen con su deber, haciendo pasar a la consulta al que le corresponde. Como debe ser.

Desgraciadamente, esta clase de espectáculos denigrantes, se vienen realzando con alguna frecuencia, por parte de aquellas personas que imponen su ley por la razón de la fuerza y, con todas estas clases de actos, hay que acabar, de una vez por todas, porque sólo conducen al deterioro de las instituciones.

No somos los más indicados para decir el sistema que hay que imponer para acabar, cuanto antes, con estos bochornosos espectáculos. Doctores tiene la iglesia, como decía aquel, para pone fin al vandalismo existente en las escuelas y en los ambulatorios porque, sin duda alguna, estos son actos vandálicos que a nada conducen. Y son a esos doctores, a los que corresponde tomar las medidas necesarias, sin paños calientes, para acabar con todo estos actos que tanto daño están haciendo a la sociedad.

Pongamos todos de nuestra parte, cada uno la parte que le corresponda, para que estos bochornosos actos no vuelvan jamás a suceder y, mucho menos, en una sociedad que se considera civilizada.

El respeto hacia los demás, empieza por el respeto a uno mismo. Quienes correspondan deberán tomar las medidas que sean para poner fin, de una vez por todas, a esta clase de actos. Por eso, para acabar desde aquí y desde ya, pedimos ¡Basta ya!.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto