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economía - DOMINGO, 3 DE FEBRERO DE 2008


Dolores Romero y Carmen Soto. reduan.

reportaje
 

Una idea se convierte en empresa

Las ganadoras del I Concurso
Nacional de Ideas Emprendedoras
‘Ciudad de Ceuta’ pasaron el viernes
por Notaría para constituir su sociedad
y mañana comenzarán a trabajar en su
local en el vivero de empresas de la Cámara
 

CEUTA
Gonzalo Testa

local
@elpueblodeceuta.com

Exactamente cinco meses después de que, en las Murallas Reales, el jurado eligiese su proyecto ‘CDD Documática’ como ganador del I Concurso Nacional de Ideas Innovadoras Ciudad de Ceuta, Dolores Romero, Carmen Soto y Rosario Parrado estamparon el pasado viernes en Notaría su firma para convertir dicho proyecto en una realidad jurídica bajo la forma de una Sociedad Limitada.

Mañana, cuando abran las puertas del local que podrán utilizar gratuitamente durante un año en el vivero de empresas de la Cámara de Comercio como parte del premio que les correspondió por ganar dicho certamen, ‘CDD Documática’ será una realidad física, palpable, llamable [620 86 34 25] y visitable [calle Dueñas, nº 2].

Romero, Soto y Parrado son las tres socias de una empresa que abrirá un nuevo nicho de mercado, hasta ahora inexplorado, en Ceuta: el de la custodia, digitalización y destrucción (de ahí sus siglas, CDD) de documentos de papel. Por esta idea fueron escogidas como la mejor de las cuatro ideas emprendedoras que llegaron a la final del certamen, promovido y coorganizado por Procesa, Academia Ecos, Figueroa y Soto Asesores, la Cámara de Comercio y la Confederación de Empresarios locales.

Gracias a ella recibieron 3.000 euros en metálico, un equipo informático de última generación, la citada oficina en el vivero de la Cámara, una línea ADSL gratuita y asesoramiento fiscal, laboral y contable sin costes durante doce meses.

De todas las partes del premio, la que las decidió a tirar para adelante con la idea fue la oficina en el vivero, que les ahorrará un gran coste fijo durante su primer año de trayectoria empresarial, aquel en el que las sociedades más débiles naufragan con más facilidad.

Sus clientes potenciales serán, según explican Romero y Soto, tanto empresas públicas como privadas interesadas en reducir los problemas que en cuanto a manejo y espacio genera el papel. Primero, ofreciéndose para digitalizar cuantos documentos se les requiera; después, para guardarlos el tiempo necesario.

“Al precio que está el suelo en Ceuta mantener locales llenos de papel es un desperdicio, tanto o más que obligar a los empleados a perder tiempo buscando datos en estanterías cuando pueden hacerlo digitalmente a través de su ordenador”, explica Dolores Romero, que a caballo entre Málaga y Ceuta se muestra “agradecidísima” al programa ‘Ceuta Emprende’, en cuya filosofía se incardina tanto la primera edición del concurso que ella y sus socias ganaron como la segunda, que ya se está preparando a la vista del éxito de la primera.

Sobre ese punto de partida, además de la provisión de fondos obligatoria para constituir la sociedad con el correspondiente capital social las promotoras de ‘CDD Documática’ han adquirido “los primeros equipos informáticos imprescindibles” para comenzar a trabajar. A corto plazo esperan poder contratar a alguien que ejerza la labor comercial “e ir despegando”.

Más tarde llegará, si todo marcha como esperan y desean, su propia página web, a través de la cual, a medio plazo, sus clientes podrían consultar cualquier documento de sus bases de datos digitalizadas sin ocupar espacio siquiera en sus discos duros.

“Todas las tareas se desarrollarán con los correspondientes contratos de confidencialidad, lo que nos permitirá tanto digitalizar como custodiar documentos de instituciones o de compañías privadas con todas las garantías”, amplía Soto, quien coincide con su compañera en que seguramente el espacio más rentable de su negocio sea la custodia de documentos, para lo que tendrían que hacerse con una nave industrial con las debidas garantías de seguridad.

Más adelante llegaría la tarea de la destrucción: “Con el papel es relativamente fácil de hacer, pero con los documentos digitales hay que tomar mayores precauciones para que no se puedan recuperar por terceras personas”, explica Romero. Eso será, en cualquier caso, con el paso del tiempo. Ahora es el momento de construir.
 

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