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El Ceutí y el EBIDEM Melilla se quedaron de nuevo con las
ganas de medir sus fuerzas en el Díaz-Flor. El derbi
norteafricano correspondiente a la decimotercera jornada de
la Liga regular, que no se había podido jugar el pasado 22
de diciembre por goteras en el complejo deportivo Díaz-Flor,
volvió a aplazarse al no poder cruzar el Estrecho tanto el
equipo melillense como los colegiados granadinos Elhomrani y
Escobedo Fernández por el temporal de Levante
El EBIDEM viajó ayer al mediodía en avión con dirección a
Málaga para proseguir el desplazamiento por carretera hasta
Algeciras. Guillermo Vivas, responsable de la sección de
balonmano de la U.A. Ceutí, comentó anoche en el ‘Díaz-Flor’
que “a las cinco de tarde me puse en contacto con la
expedición del EBIDEM y estaba llegando al puerto de
Algeciras. Más tarde volví a hablar con los responsables del
EBIDEM y me comentaron que se había suspendido el servicio
marítimo en el Estrecho por el temporal de Levante por lo
que no podían viajar. En Algeciras se encontraron con los
árbitros que pretendían coger el mismo barco”.
El equipo blanquinegro se puso en contacto con la Federación
Española de Balonmano (RFEBM) que le comunicó a la U.A.
Ceutí que si el EBIDEM Melilla estaba en Ceuta pitaría el
partido la pareja caballa Benítez-Carmona, pero al
encontrarse en la otra orilla sin conocer a ciencia cierta
cuando podría cruzar el Estrecho, el choque se aplazaba
hasta nueva fecha. Todo apunta que se disputará en Semana
Santa al no haber jornada de Liga.
Resignación
Ali señaló que “no jugar este partido es un contratiempo, a
pesar de que tenemos las bajas de Ramón y Munir, pero no
podemos hacer nada y habrá que buscar una nueva fecha”. Los
blanquinegros, si la climatología lo permite, deben viajar
hoy rumbo a Moguer para disputar un partido ‘a cara de
perro’ con el Pedro Alonso Niño. La expedición ceutí está
citada a las ocho y cuarto de la mañana para intentar
embarcar a las nueve. Si el servicio marítimo está
interrumpido el Ceutí no podrá desplazarse a la localidad
onubense y tendría dos encuentros aplazados. El PAN, que
empató a 26 goles en la primera vuelta, empezó la Liga como
un tiro, sufrió un bajón que lo apartó de las primeras
posiciones, pero se recuperó a tiempo para meterse en la
pelea por las dos primeras posiciones del grupo. En la
última jornada ganó por la mínima en Elda y en su pista sólo
puntuaron el Petrer, que empató, y Mijas y Hexa Aldemar que
lograron el triunfo. Ganó los otros seis partidos.
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