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Es tan joven que no asistió a la entrevista que la Sala Café
Club concierta antes de los conciertos. Sergy tiene 12 años,
toca la batería y forma, junto a la bajista y cantante Dyna
y el guitarrista Henryk, Mördark, grupo inclasificable de
rock duro que mañana promete “meter miedo” con su música
oscura y sus vestimentas épicas.
“No es que sea explotación laboral infantil”, bromeó Henryk,
“es que el muchacho quiere tocar”. Algo que hace a Mördark
único, ya que no hay constancia en España de una banda que
cuente en sus filas con semejante precocidad.
Sergy va al colegio, juega en el recreo, hace los deberes y,
de vez en cuando, se sube a un escenario a tocar “doom epic
metal” o “metal épico de las tinieblas”, como define su
cantante y bajista, Dyna, la música del grupo si uno se pone
a buscar etiquetas que puedan orientar el estilo de este
trío ceutí.
“Hacemos una música un poco tenebrosa, pero nos gusta
también darle toques medievales y épicos”, afirmó Dyna,
quien recordó que la puesta en escena incluirá esta noche
(el concierto está previsto para las diez de la noche) una
vestimenta impactante.
“De guerreros medievales”, señaló la cantante y bajista,
“porque nos gusta esa estética”. El guitarrista Henryk
bromeó también al respecto: “Damos un poquillo de miedo,
porque la gente tiende a pensar que les queremos matar”.
A Henryk le resulta muy difícil quedarse con los grupos que
podrían ser un referente para su música. “Es una tarea muy
difícil, porque nuestro estilo es propio, único”, declaró, y
le pudimos sacar a regañadientes los nombres de Saxon o
Manowar.
Respecto al panorama metal en la ciudad autónoma de Ceuta,
Dyna consideró que está mejorando. “Antes no había mucho,
pero estamos viendo que poco a poco la gente joven se está
animando y se forman grupos”, opinó, al tiempo que destacó
la labor de la Casa de la Juventud a la hora de formar a
chicos a tocar el instrumento musical que más les atraiga,
si bien “yo aprendí a tocar por mi cuenta”, añadió.
Así, la cantante recordó el festival benéfico de rock que se
montó para recaudar fondos para el niño que logró salvar su
brazo izquierdo tras serle diagnosticado un cáncer. Esa fue,
además, la última actuación en Ceuta de Mördark. “Fuimos
catorce grupos los que tocamos, por lo que parece que hay
una base importante ahora mismo”, declaró.
Aunque Mördark grabó un disco hace ocho años, antes de que
Henryk marchara a vivir a Barcelona, ese plástico “ya casi
no tiene nada que ver con la actual formación y orientación
del grupo”.
“Ahora estamos trabajando en poder grabar un disco, que
tendrá un sonido más moderno del que grabé hace tanto
tiempo”, señaló el guitarrista.
Historia de Mördark
Mördark fue fundado en 2000 por Henryk Wyld (Enrique Ortiz),
guitarrista natural de Ceuta que tocó anteriormente en
Soulless. Practicando un black metal de los años 80,
tuvieron un importante éxito local con la demo Siervos de
Satán.
Tras la marcha de varios componentes (hasta ocho), se grabó
lo que sería el primer single, En el más allá. Tras varios
meses de ensayos, Wyld tomó la decisión de llevar su
proyecto a tierras catalanas durante cuatro años.
De vuelta al norte de África, reanudó Mördark con Iván
Hammer, Jess, Cristian, Dina y Rafa Carabante.
El grupo debuta en un festival benéfico tras cuatro años
fuera de su ciudad. Tras el concierto, la marcha por motivos
de estudios de Carabante y Jess, obliga a Henryk a buscar
nuevas caras para continuar con el grupo. Dina pasa a
ocuparse del bajo y la voz y Sergio, un jovencísimo batería
de tan sólo 12 años de edad.
“La formación es nueva, pero el espíritu sigue siendo el
mismo”, dice Henryk, que afirma que desde hoy día se está
trabajando para editar un nuevo single: Hidden in the dusk,
tema con el que quieren grabar su primer vídeoclip.
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