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El Consejo de Gobierno aprobó en su reunión semanal
ordinaria de ayer firmar un convenio con los Hermanos
Franciscanos de la Cruz Blanca por valor de 150.000 euros
con el propósito de crear un “albergue alternativo” a la
atención que presta Servicios Sociales comunitarios para
hacer frente a situaciones de “emergencia social” como
inundaciones y similares.
El Consejo de Gobierno de la Ciudad Autónoma dio ayer su
visto buena a la firma de un convenio entre la Consejería de
Asuntos Sociales que dirige Carolina Pérez y los Hermanos
Franciscanos de la Cruz Blanca para poner en marcha una
“acción concertada” entre ambas partes que permita a la
ciudad disponer de un albergue alternativo con 46 plazas en
las instalaciones de la orden religiosa con el que poder
hacer frente con mayores garantías a situaciones de
“emergencia social” como inundaciones y similares.
Según explicó la portavoz del Gobierno autonómico, Yolanda
Bel, este convenio, que se firmará por primera vez,
permitirá a la ciudad disponer de un servicio extra al
margen de los que ya se ofertan desde los Servicios Sociales
comunitarios para ofrecer una “atención integral” a los
vecinos que se vean afectados por situaciones de emergencia
de diversa índole y tengan que ser desalojados de sus
viviendas.
“El régimen en el que serán atendidos será de pensión
completa”, explicó Bel en su comparecencia ante la prensa,
donde detalló que el montante del convenio asciende a
150.000 euros para todo el ejercicio 2008.
El inmueble que se dedicará, en caso necesario, a este
cometido, será el que ocupaba la antigua ‘Pensión Manolín’,
situada en la carretera de servicio del llamado Barrio de
las Latas.
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