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El “autoproclamado” primer periódico de la ciudad a través
del cabezón, se siente tristemente tratado por la portavoz
socialista en la Asamblea de Ceuta y en consecuencia le
otorgan el título de peor portavoz de la historia del PSOE,
anunciando además un boicot a sus comparecencias, cosa que a
buen seguro agradecerá la socialista y por añadidura
agradecería todo el mundo, si quien ha de cubrir cualquier
comparecencia es el cabezón, francotirador inmoral donde los
haya, pero más burdo que un saco de bellotas, a quien por
cierto un delegado del gobierno descerebrado, le permitió
hacer sus pinitos en política (porque había que estar
descerebrado para dejarle ocupar un despacho oficial a
semejante acémila) y dejó un “recuerdo imborrable” de los
que es mejor ni acordarse ni comentar.
Alguien anda todavía entontecido por las calles de Ceuta,
pensando que el resto del mundo le debe respeto y
consideración, un mundo, el ceutí, que ya le repudió hasta
la saciedad por lo que todo el mundo sabe. Y ahora,
refugiado en su panfleto y detrás del grandote sólo de
cuerpo, se cree con derecho a juzgar y, lo que es peor, a
orientar la conducta de los actuales representantes
políticos.
¿Pero, por qué todavía no está en el lugar que
definitivamente le corresponde, que es la nada?, ¿por miedo
al panfleto?: no, para nada. Sólo que hay algún político de
medio pelo metido a mandamás que le mantiene vivo aún a
costa de perjudicar a su propio partido, y que se aprovecha
de la dulce sombra de quien tiene la total confianza de los
ceutíes. ¡A ver si reacciona alguna vez!.
La señora Ramírez, será y ciertamente lo es, nueva en estas
lides de la política y, como consecuencia de ello, no posee
las llamadas tablas de quien ya es veterano, pero ha
mostrado valor para quedarse al frente de la corrida delante
de los miuras, sobre todo después de haber visto salir
desangrados a los primeros espadas y, además, si lo que
importa son los argumentos y no como se exponen, es de
justicia reconocer que en muchos de cuantos esgrime le
asiste la razón, como los que soltó en el último debate
sobre el estado de la ciudad, frente a la algarabía de una
bancada popular que se alteraba cuando ella, sin voces,
metía el dedo en las muchas llagas que a algunos les
supuran.
Estas consideraciones que hago desde la más absoluta
libertad y objetividad, no caben en los intereses decadentes
de quienes ahora, desde el, por ellos hollado, altar de la
libertad de expresión, pretenden mancillar el nombre y el
prestigio de Inmaculada Ramírez, porque no sirven a la causa
de la información y carecen de la mínima educación.
De la Encina es el presidente de la comisión delegada del
PSOE en Ceuta, pero aquí no tiene ni votos ni
responsabilidad más allá de las puertas de la sede de la
calle Daoíz. El Sr. Delegado del Gobierno, ya ha manifestado
su intención de cooperar con la Ciudad Autónoma y de
mantener su papel institucional más allá del partidista y
Carracao es una joven promesa que de momento juega en
regional, porque así lo dispusieron mayoritariamente los
ceutíes y conste que los tres son personas de gran valía.
Pero quien juega en primera división en la política ceutí es
Inmaculada Ramírez y a buen seguro que necesita de la
afición, como el Ceuta estos días.
Lo que pasa es que quien la abuchea, además de estar muerto
de envidia, no es ya ni una vieja gloria.
¡Animo compañera!.
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OPINIÓN
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COLABORACIÓN
