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Lo mio “fue tarea de muchos”, asi
terminaba el libro de la Saeta Rubia Alfredo D,Stefano. Esta
frase me la hago mia quizá en algunos momentos, de esplendor
a raudales, cuantas veces me he visto solo frente a un
montón de folios, historias y vivencias y no saber por donde
empezar , si no cuando le he dado rienda suelta a mi
fantasia e inspiración, las musas fueron cogiendo color y
forma para contemplar en estas letras de mi periodico,
tantos rincones de mi tierra.
Cuando me han llegado a eso de los diez años de escribir,
por aquello de que empezé con 23 años , me fueron llegando
los reconocimientos y las invitaciones y claro está con el
salón de la fama repleto de saludas y pases de favor, se me
fueron arrimando como si fueran las promesas de las
procesiones.
Cuanta gente se ha casado, han hecho cumpleaños y muchos
niños han bautizado, Javier tu eres prescindible, tu te
quedas fuera de la lista, una vez mas.
Por eso me desespero cuando me falta el aire y la
tranquilidad, te calmas y empiezas a cabilar, si acaso me
pongo con un puñado de pajarillos, y los pongo a arreglar, a
escaparme a mi playita, a caminar por la orilla del mar, al
grito de “viru” aparezco con Carlos y Manolo en el gimnasio
USHIRO, el sudor y el poderio de las pesas van a comenzar.
De charlas cutres de funcionarios, que ven engordar sus
nominas con retribuciones y tarifas, les salen pagas de
3.000 euros, con la de crisis que hay y despues dicen que no
hay dinero, vete a un bar y estan todos los bares llenos.
Que se me pare el tiempo dandole de comer a un factor rojo y
un timbrado español, el rumor de las olas de Punta Blanca, y
como me crujen las carnes y los huesos, con el machaqueo de
las pesas, maldito sea el movil cuando me dice, que hay una
llamada perdida. Si habia cumplido con mi deber, que son mas
de 25 años trabajando, asi sea hasta que el cuerpo y la
cabeza aguante.
Se me paró el reloj y se acaba el momento de mis aficiones,
entre cariños y amores, no me olvido de mi amor y mis hijas,
que de veces no he podido y he perdido el sentido, queriendo
hacerles unas letras, si antes de sentarme a la pantalla del
ordenador, con cuatro papeles de chuletillas y
recordatorios, me siento a la mesa, el mejor café del mundo
al desayuno y la merienda, la mejor comida del mundo y
juntos mientras comemos, los bocatas de la cena viendo las
películas del televisor.
La ropa limpia, recien planchada que voy vestido y salgo a
la calle como un San Luis, todos queremos mas y de que tanto
me quejo, si antes de partir por la puerta, abro la de mis
hijas en vacaciones y me despido con un suspiro mientras
dormitan.
Asi de sencillo es Javier Chellarám para unos para otros,
uno del montón que inventó la charla, muchacho alto con
gafas, aquí con mis lectores del Pueblo, mis Escritos
Caballas, de Ceuta esta nuestra tierra, con lo malo y con lo
bueno, asi es mi vida.
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OPINIÓN / ESCRITOS CABALLAS
