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					La UGT acusa al consejero de Medio Ambiente, Ramón Gavilán, 
					de "desdecirse de sus compromisos" con relación al conflicto 
					laboral de los trabajadores de Tratagua. El sindicato exige 
					de la administración local que aporte soluciones a este 
					problema, como propietaria de la planta depuradora y afirma 
					que el coste salarial que se pide equivale a 45 minutos del 
					presupuesto de la Semana Náutica. Los trabajadores 
					realizaron ayer una nueva concentración de protesta. 
					La central sindical se muestra "sorprendida" por el "cambio 
					radical" que aseguran se ha producido en el consejero de 
					Medio Ambiente, Ramón Gavilán, porque "ahora se desdice" del 
					compromiso que adquirió en diciembre de "mediar con la nueva 
					empresa entrante para contribuir a las mejoras de los 
					trabajadores de la Depuradora de Aguas.  
					 
					El mejor aval de un representante político es su palabra y 
					su compromiso. Aquí la calidad de ese aval ha quedado 
					bastante claro. Confiamos, y nos vendieron la moto sin 
					ruedas", censuraron los trabajadores. 
					 
					Mantiene UGT que a fecha de hoy la empresa Sadyt, que ganó 
					la adjudicación de la Planta Depuradora en sustitución de 
					Tratagua, "desconoce las reivindicaciones de los 
					trabajadores, el problema y las posibles soluciones. La 
					Consejería de Medio Ambiente, no sólo debe poner una mesa y 
					cuatro sillas en su compromiso por ayudar en un centro de 
					trabajo de su propiedad, deben informar, mediar y aportar 
					soluciones, es su obligación como propietario". 
					 
					Semana Náutica 
					 
					El sindicato recuerda que el problema afecta a 35 padres de 
					familias melillenses y asegura que su reivindicación 
					equivale "al valor de unos 45 minutos de la Semana Náutica". 
					Asimismo, la organización sindical, ante las declaraciones 
					del responsable de Medio Ambiente sobre que los trabajadores 
					estén mal asesorados, reconoció que "es una posibilidad 
					subjetiva", pero apostilla que "es una realidad palpable que 
					los trabajadores están decepcionados por la falta de 
					compromiso". 
					 
					Por último, los trabajadores de la Depuradora de Aguas, que 
					protagonizaron ayer una nueva concentración de protesta ante 
					el Palacio de la Asamblea, mostraron su pesar a los 
					melillenses por las "molestias que puedan causarles" los 
					próximos días de huelga. "Sentimos cualquier molestia que 
					pudieran darse, ya sea en la calidad de las aguas en 
					nuestras playas, como en la zona marroquí", pero recordaron 
					que su objetivo no es otro que mejorar sus condiciones de 
					trabajo, ya que "son los profesionales que están expuestos 
					al mayor riesgo biológico de la ciudad". 
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