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					No fue fácil la captura. La primera vez los marroquíes 
					lograron zafarse de la presión policial tras una persecución 
					por San Antonio, pero las pesquisas a través del vehículo en 
					que huyeron dieron con el paradero de los dos ladrones en 
					ese mismo día 7. Ambos tenían orden de no entrar en España. 
					Especializados en robos con fuerza, los marroquíes detenidos 
					no fueron presa fácil para los funcionarios policiales 
					quienes debieron emplear la fuerza física para reducir a uno 
					de ellos por revolverse violentamente contra los agentes.
					 
					 
					La Policía Judicial y en concreto la UDEV había montado un 
					dispositivo que trataba de poner fin a los varios robos que 
					se venían produciendo en el Poblado de San Antonio. En la 
					madrugada del pasado día 7, una patrulla de vigilancia 
					policial observó la presencia de dos individuos que salían 
					de la zona en una motocicleta. Eran las seis menos cuarto de 
					la mañana. Al detectar a los policías emprendieron la huída, 
					aunque el vehículo policial pudo cruzarse en su camino. A 
					partir de ahí, prosiguieron la huida a pie y lograron 
					zafarse de los agentes.Más tarde se supo que habían 
					perpetrado otro robo en el Poblado mientras los propietarios 
					de la vivienda dormían. Con los datos de la motocicleta se 
					dio con la propietaria quien dijo que se la había prestado a 
					un tal Mohamed que le conocía de hacía tiempo. La joven 
					aporta la descripción física y se identifica al sujeto 
					fotográficamente. Las pesquisas policiales dan como 
					resultado la certeza de que el individuo buscado se hallaba 
					en el interior de una vivienda de la calle Rayo Moreno. El 
					dueño del domicilio permitió la entrada de los policías a 
					las 21’00 horas y se le localizó en la cocina donde opuso 
					fuerte resistencia. En una mochila se le hallaron artículos 
					robados durante la madrugada en el Poblado. 
					 
					Sólo quince minutos después se detuvo al compañero de 
					andanzas. Fue en el cafetín ‘las Dos H’. Este también tenía 
					objetos del robo anterior.  
					 
					No quisieron prestar declaración en sede policial, por lo 
					que ya han sido puestos a disposición judicial. Ambos tenían 
					en su haber ocho y nueve detenciones respectivamente y orden 
					judicial de no entrar en España uno hasta 2017 y otro hasta 
					2018. 
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					Con prohibición de entrar en España y aún así, en Ceuta 
					No son los dos únicos casos. En 
					esta ocasión estos dos elementos eran los que venían 
					protagonizando los robos en el poblado de San Antonio. Son 
					especialistas en delitos contra el patrimonio mediante el 
					robo con fuerza en domicilios y con un modus operandi claro: 
					de madrugada cuando los propietarios duermen. El Poblado de 
					San Antonio se ajustaba a su operativa y así han venido 
					actuando hasta el pasado día 7 cuando fueron detenidos. Pero 
					también los habían detenido antes para ser expulsados del 
					país con un mandato de prohibición de entrada a España. Sin 
					embargo, una tras otra, lograban ‘colarse’ a Ceuta, robar, 
					ocultarse en viviendas de conocidos y retornar a Marruecos. 
					Conocen perfectamente la flaccidez del sistema español y, 
					sobre todo, la manera de ‘colarse’ en la ciudad. Habrá que 
					preguntarle al de la UCRIF porque estos dos irregulares son 
					ya una banda organizada ¿que no?. 
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