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					El Frente para la Defensa de la Integridad Territorial y la 
					recuperación de Ceuta y Melilla y los islotes ocupados (FDIT) 
					junto con la Asociación Sáhara Marroquí, que en los últimos 
					meses han multiplicado sus declaraciones y acciones 
					‘antiespañolas’ había organizado para mañana día 14 un 
					desembarco civil en ‘Leila’ 
					No va a ser posible, a priori, que se produzca ninguna 
					movilización hacia la isla de Perejil pese a la insistencia 
					de la organización civil que no permitía, siquiera, 
					injerencia sobre su decisión desde el Gobierno de Rabat.  
					 
					Con base en Tánger, el FDIT vio la luz el pasado 14 de 
					diciembre y se compone de un “comité nacional para la 
					liberación de Ceuta y Melilla y los presidios ocupados”, un 
					“comité de coordinación de instancias de la sociedad civil 
					del norte de Marruecos”. 
					 
					Pero el Gobierno marroquí ha tomado cartas en el asunto y no 
					puede por menos que cumplir con los acuerdos alcanzados en 
					su momento de no modificar el ‘statu quo’ del islote. El 
					tetuaní Lahbib Haiji, activista antiespañol proclama sus 
					ideales frente a lo hispano basándose en el histórico de que 
					los moriscos fueron expulsados de la península ibérica. 
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					Medidas diplomáticas y mediación oficiosa de otras 
					organizaciones 
					Desde que el pasado 7 de julio, 
					Abdelmounaim Chaouki, presidente del comité de coordinación 
					de instancias de la sociedad civil del norte anunciara en un 
					diario marroquí sus intenciones de llevar a cabo una 
					movilización de este tipo, respaldada por la FDIT, la 
					representación diplomática en el país vecino tuvo sus 
					contactos para conocer datos al respecto. La Inteligencia 
					española conoció más detalles y Marruecos que aunque apoya 
					las tesis ultranacionalistas de la organización no puede 
					mostrarse de un modo frontal tan hostil a España, ha 
					contribuído en sofocar el fuego nacionalista utilizando 
					mediadores válidos oficiosos para calmar los ánimos. Aún así 
					las fuerzas de seguridad marroquíes tomarán posiciones para 
					evitar cualquier acción de las anunciadas 
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