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La ciudad autónoma de Ceuta no corre el riesgo de la
despoblación, ni mucho menos. Su saldo migratorio en 2007
fue negativo, pero arroja conclusiones que la sitúan entre
las localidades que, si se analizan los grupos de vecinos
que se van y los que se reciben por su edad, la sitúan entre
las que los Mayores no escogen para su retiro. Durante el
año pasado se fueron de Ceuta 2.344 españoles y 212
extranjeros, mientras que se recibió a 1.974 nacionales y a
203 foráneos.
Nacimientos y migraciones exteriores aparte, los datos de la
Estadística de variaciones residenciales relativos al año
pasado que acaba de publicar el Instituto Nacional de
Estadística (INE) revelan que durante 2007 la ciudad
autónoma de Ceuta perdió 379 vecinos en lo que al movimiento
poblacional dentro de España se refiere.
Por grupos de edad, el saldo positivo fue especialmente
acusado entre los menores de 16 años. Así, durante los doce
meses del año pasado dejaron de vivir aquí un total de 397
jóvenes, mientras que sólo se recibió a 265 que hasta
entonces residían en otras provincias de España.
La misma tónica se mantiene entre la población que tiene de
25 a 34 años, aunque el grupo de 16 a 24 salva la suma
total: a Ceuta llegaron 1.012 españoles procedentes del
resto del país, 473 menores de 24 años y 539 mayores.
Mientras, se fueron 1.094.
De 35 a 44 años el saldo también es negativo (se fueron 387
y llegaron 292), pero la balanza se equilibra de 45 a 64
años. Más viejos, Ceuta vio irse a 138 vecinos y sólo acogió
a 66.
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