PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura
Melilla

Opinión
Archivo
Especiales  

 

 

OPINIÓN - JUEVES, 11 DE SEPTIEMBRE DE 2008

 

OPINIÓN / LAS NOTAS DEL QUIM

Crisis e inmigrantes
 


Quim Sarriá
quimsarria@elpueblodeceuta.com

 

Me despierto con una sensación desagradable en la boca. Tal vez me haya sentado mal el bocata de chorizo que cené anoche, entremezclado con las pesadillas de chorizos rondando las calles.

No puedo remediarlo, pero cuando alguien comenta algo sobre la crisis, basándose en certezas aproximadas, me produce una inquietud. Inquietud monetaria se entiende.

La proclamación del ministro Solbes sobre el fantasma de la recesión que se cierne sobre el país no es grata y ello conlleva a meditar sobre la situación general y estudiar las numerosas críticas que sueltan a través de los medios de comunicación quienes se consideran afectados.

Me llama la atención una articulista, inmigrante por más señas, que hace alusión a una película americana que trata sobre la desaparición de los inmigrantes en California. Puede que tenga razón en lo que escribe, pero creo que no ha tenido en cuenta de que los Estados Unidos no pueden definirse como país en la misma medida que España. Los EE.UU carecen de historia en el sentido de que su demografía está compuesta totalmente por inmigrantes. Los auténticos americanos están confinados en reservas, ya sin plumas en la cabeza. Y van en declive.

Un amigo mío se sulfura fácilmente cuando trato sobre inmigrantes sin tener en cuenta que no me refiero al conjunto general. Una cosa es que necesitemos mano de obra y otra cosa es que entren por huevos cuantos quieran y como quieran.

Nadie hasta ahora ha hablado o escrito sobre la excedencia de inmigrantes que viven en el país, desocupados u ocupados en faenas clandestinas, ni sobre el auténtico índice de criminalidad existente actualmente. Ni nadie se ha preocupado por los antecedentes de LA MAYORÍA DE INMIGRANTES ILEGALES.

Muchos defienden a los inmigrantes “conocidos”, esos que trabajan con contratos y cotizan a la Seguridad Social en la creencia que TODOS LOS INMIGRANTES están en esa situación y por ello generalizan sus ataques a quienes están en contra del incremento inmigratorio.

Muchos están indignados por cómo se tratan a los inmigrantes cuando la verdad es que deben y tienen que estar indignados por cómo se portan la mayoría de esos inmigrantes que defienden.

No tergiversemos las cosas. España necesita mano de obra, eso es una verdad innegable, que solo la pueden cubrir gente venida de fuera. Pero ha de ser de manera legal y pacífica, no haciéndole el juego a mafias que aprovechan la coyuntura para establecer sus dominios en todos los ámbitos.

Pero cuando esa necesidad está colmada con exceso, lo lógico sería vetar la entrada de nuevos inmigrantes y ello no significa que seamos racistas y la medida de Corbacho no vulnera ningún derecho de los que aún han de entrar, como dice esa articulista inmigrante, porque simplemente carecen de tales derechos. El país no puede convertirse en el buen samaritano, la crisis lo aconseja.

Pregunto a quienes atacan posturas lógicas y reales sobre inmigración: ¿por qué no hacen esa lucha en los países de origen de los inmigrantes? ¿Por qué no protestan ante los gobiernos de esos países?

Lo que molesta, con mucho, es que esos inmigrantes reclamen derechos aquí, en nuestro país, y no abran la boca en sus respectivos países. No vengan con alegaciones sobre el terror o sobre las dictaduras, no entran en el caso.

Se equivoca, y mucho, la articulista inmigrante cuando pregunta que ¿cómo es que nadie puso el grito en el cielo cuando, de entrada, se cambió el nombre del ministerio y pasó a ser de Trabajo e Inmigración?, añadiendo que nadie dijo ni “mu” cuando nadie vio clara la vinculación de la mano de obra y el mercado laboral… poco ha de estudiar para comprenderlo.

La lógica postura de Corbacho no afecta, como quiere dar a entender esa articulista, a los inmigrantes que ya están cotizando a la Seguridad Social ni a los que están residiendo en el país, algunos trabajando sin cotizar siquiera.

¿Se han preguntado cuantos de estos inmigrantes han portado un arma y disparado contra un semejante en sus respectivos países? Piensen y reflexionen, damas y caballeros.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto