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Ceuta salió de la alerta por lluvias decretada por la
Agencia Estatal de Meterología (AEMET) a las 11.00 horas,
anteriormente había abandonado el aviso por vientos y
fenómenos costeros. La jornada de ayer se saldó con dos
incidentes de gravedad: el hundimiento del techo en una
vivienda de la Almadraba que obligó a realojar a la familia
y el corte de suministro eléctrico en las zonas del pantano
y el Monte Hacho. El Gabinete de Crisis de la Ciudad volvió
a reunirse a las 9.00 horas por quinta vez en tres días. La
predicción para hoy de la AEMET señala una recuperación de
la completa normalidad.
El temporal pasó y mientras el jueves en la ciudad las
miradas de preocupación y desconfianza se dirigían hacia
arriba, el golpe le vino por un lado, desde Levante. Ceuta
amaneció ayer con las alertas de la Agencia Estatal de
Meteorología aún vigentes: la naranja, que indica “riesgo
importante”, para lluvias, tormenta y fenómenos costeros; y
la amarilla, el nivel más bajo de un sistema de tres
valores, para los vientos. Cuando se reunió a las 9.00 horas
el Gabinete de Crisis convocado por el presidente de la
Ciudad Autónoma, Juan Jesús Vivas, por quinta vez en tres
días, desaparecieron los avisos de la AEMET para los vientos
y los fenómenos costeros. Dos horas más tarde se retiraba
cualquier tipo de alerta tras tres días de tensión con el
recuerdo fresco de la colosal tormenta de los 533 litros por
metro cuadrado de finales de septiembre.
Pocas fueron las circunstancias de gravedad y la mayor parte
de los incidentes, provocados fundamentalmente por el
viento, registraron poca importancia. La más severa de las
que ocurrió ayer fue el desalojo de una familia en la
Almadraba al caerse el techo de su vivienda. La Consejería
de Asuntos Sociales ofreció a los afectados un alojamiento
alternativo pero prefirieron solucionar la situación
mediante sus propios recursos.
El otro gran percance sucedió durante la madrugada. Las
ramas de dos árboles azotadas por el viento estuvieron
tropezando con una línea de baja tensión, lo que provocó
cortes de electricidad en el pantano y el Monte Hacho.
Parque Móvil se desplazó hasta el último punto para devolver
el suministro con un generador eléctrico a las viviendas y
comercios de las zonas altas así como al centro de menores
de La Esperanza. La urbanización Pueblo de San Antonio
también tuvo cortes puntuales de luz que no fueron
restablecidos definitivamente hasta las 11.30 horas.
La Ciudad planteará una solución para las interrupciones en
el suministro eléctrico, excesivamente habituales en esas
zonas. El problema principal es que la unión se realiza
mediante cableado aéreo, que se puede ver afectado con
vientos fuertes. La Consejería de Fomento solicitará al
Ministerio de Industria para establecer conexiones
subterráneas. La operación está planteada con un convenio
que se rubricaría entre ambas administraciones y la Empresa
de Alumbrado.
Además de estos dos incidentes se han producido otros de
menor relevancia como la suspensión del tráfico por la caída
de árboles en la bajada de la potabilizadora y en la zona de
Cuatro Caminos que fueron retirados por los servicios
municipales. También hubo una leve inundación en el Recinto,
pese a que no cayera una gota de agua, provocada por una
tubería de la zona que reventó. Los Bomberos comunicaron el
incidente a la empresa municipal de agua Acemsa que
solucionó el disturbio.
La predicción de la Agencia Estatal de Meteorología para hoy
augura una situación completamente normalizada, sin alertas,
con vientos calmos que cambiarán a poniente durante las
primeras horas del día y cielos nubosos con una probabilidad
de precipitaciones que no supera el 20 por ciento.
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Los Bomberos realizaron 115 intervenciones durante la
duración de la alerta
El servicio de bomberos hizo unas
115 intervenciones durante los tres días que la ciudad
estuvo en alerta por las adversas condiciones
meteorológicas. La mayor parte de ellas fueron de menor
importancia: la retirada de árboles caídos o de cascotes en
las calles. El jueves tuvieron que rescatar a un arqueólogo
que quedó parcialmente atorado en Pasaje Fernández por la
caída de tierra del lateral de una zanja que presentaba
inestabilidad debido a las lluvias. Los bomberos
consiguieron rescatarlo tras 30 angustiosos minutos de
trabajo También explotó una motobomba que achicaba agua de
uno de los garajes de la avenida de África en el que resultó
herido leve el hombre que manipulaba la maquinaria. . El
viernes la caída de un árbol rompió el muro del antiguo
cuartel De las Heras y tuvieron que desescombrar la zona.
Ayer las intervenciones se concentraron sobre todo durante
la madrugada, a partir de las 9.00 horas con el descenso del
temporal de vientos sólo realizaron entre 12 y 15
intervenciones relacionadas con el mal tiempo de poca
relevancia: persianas rotas y más árboles que cedieron al
viento.
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Nuevo temporal
