deportes - DOMINGO, 12 DE OCTUBRE DE 2008

CEUTA
Juanma Navas
deportes@elpueblodeceuta.com

Al igual que ocurrió el curso pasado el Ceutí no pudo viajar a Moguer para enfrentarse al Pedro Alonso Niño a causa del temporal de Levante en el Estrecho. Los blanquinegros tenían previsto embarcar ayer a las once de la mañana, pero al encontrarse el servicio marítimo suspendido se pusieron en contacto telefónico con el equipo onubense para comunicarle la imposibilidad de realizar el desplazamiento.

Guillermo Vivas, responsable de la sección de balonmano del Ceutí, también se puso en contacto con la Federación Española para informar del asunto. Vivas explicó que “he hablado con el delegado del Pedro Alonso Niño Ángel Martínez y le propuesto disputar el encuentro el sábado 1 de noviembre aprovechando que ese fin de semana la Liga sufre un parón. Me ha dicho que por su parte no hay ningún problema, pero debe consultarlo tanto con la directiva como con el cuerpo técnico”.

El Ceutí desea disputar el choque correspondiente a la cuarta jornada el 1-N (día festivo) desde la una de la tarde para poder regresar a la ciudad después del encuentro y no pasar la noche en la otra orilla. La temporada pasada, tras el obligado aplazamiento por el mal tiempo, el partido entre moguereños y caballas se celebró al mediodía.

Guillermo Vivas es consciente de que el Pedro Alonso Niño es uno de los mejores equipos del grupo. “Lo he visto jugar y es un equipo muy fuerte, al que será muy complicado sorprender en su pista. Para mí el Pedro Alonso Niño y el Ángel Ximénez son los máximos favoritos para jugar los sectores de ascenso”.
 

El Puertollano-EBIDEM Melilla tampoco se jugó

El partido entre el BM. Puertollano y el EBIDEM Melilla, que estaba fijado para el sábado a las seis y media de la tarde en el pabellón municipal de Puertollano, tampoco se jugó a causa del temporal que afectó desde el pasado jueves a la Ciudad Autónoma, donde se recogieron 30,5 litros por metro cuadrado, sumados a rachas de viento de 67 kilómetros por hora, por lo que Melilla quedó incomunicada por vía marítima. La expedición del EBIDEM trató de viajar el día del partido en avión, pero no encontró billetes.