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En los últimos meses, he
reflexionado en varias ocasiones en relación a las
informaciones manifestadas por diferentes responsables
políticos sobre la construcción del nuevo Hospital Civil de
Ceuta. En ellas, aclaré que la decisión de construir esta
nueva infraestructura correspondía, exclusivamente, al
Gobierno del Partido Popular ya que, los ejecutivos de
Felipe González decidieron como solución definitiva a
nuestros problemas sanitarios la ampliación del ya
existente.
Una vez demostrado este primer punto, es momento de
desenmascarar a quienes, sin pudor alguno, anunciaron
reiteradamente, con fines electoralistas, que el nuevo
centro hospitalario estaría en funcionamiento a principios
del 2008 cuando, la realidad indicaba todo lo contrario. Una
vez más, quedaba patente el grado de compromiso y la
sinceridad de los parlamentarios nacionales del partido
popular quienes, in situ, mostraron la verdad de las obras
de construcción de esta importante infraestructura.
En declaraciones efectuadas y recogidas en distintos medios
de comunicación incluso, en sede parlamentaria tanto, Jesús
Lopera (director territorial) , Salvador de la Encina
(diputado nacional), Elena Salgado (ex ministra de sanidad)
y Bernat Soria (ministro de sanidad) aseguraron durante la
anterior legislatura que el nuevo hospital comenzaría
paulatinamente a funcionar a partir del verano del 2008.
No obstante, el tiempo siempre dicta sentencia y, en esta
ocasión, ha sido una dirigente socialista, directora general
del INGESA quien, acompañada por el delegado del Gobierno en
nuestra Ciudad y el propio director territorial de este
organismo, la que anunciara la puesta en funcionamiento al
completo del nuevo hospital al final de 2009 incluso,
matizando “si todo va según lo previsto”.
En definitiva, al igual que ocurriese con el reconocimiento
tardío por parte del Ejecutivo de Zapatero de nuestra actual
crisis económica ahora, también hemos asistido al
reconocimiento público de estos expertos manipuladores de
que, el partido popular no mentía cuando afirmaba que los
plazos de finalización de esta obra, difundidos por los
responsables socialistas, no se ajustaban a la verdad.
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OPINIÓN / AL SUR DEL SUR
