PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura
Melilla

Opinión
Archivo
Especiales  

 

 

OPINIÓN - JUEVES, 18 DE DICIEMBRE DE 2008

 

OPINIÓN / EL OASIS

José Antonio Carracao
 


Manolo De la Torre
manolodelatorre@elpueblodeceuta.com
 

Es ya secretario general de los socialistas de Ceuta. Lo cual no es una bicoca. Máxime cuando su elección ha sido precedida de un proceso que produjo enfrentamientos que hasta se dirimieron en los juzgados. Amén de lo ocurrido en la sala de estar del hotel Tryp. Y lo que te rondaré, morena.

José Antonio Carracao tiene por delante una tarea ardua. Llena de dificultades y que le va a exigir una entrega absoluta y una fe inquebrantable en sus posibilidades. Pero las posibilidades no se consiguen por arte de birlibirloque. Éstas hay que hallarlas en el trabajo constante, además de estar siempre al tanto de cuanto se cuece a su alrededor para poder extender sus tentáculos más allá de la sede de la calle de Daoíz.

Lo primero que deberá hacer el nuevo secretario general es conocer a sus enemigos dentro del partido. Porque es de mal político creerse a pie juntillas que todos los propios le serán fieles en todo momento y porque sí. Y no sería el primero que cae en ese error. Aunque me consta que podrá disfrutar de asesoramientos muy válidos para poder dar sus primeros pasos con firmeza.

Carracao, por estar prestando sus servicios en la Delegación del Gobierno, sabe que en ésta hay una prioridad: que en Ceuta las relaciones institucionales sean las mejores para evitar que el nombre de la ciudad se convierta en motivo de escándalo nacional por desavenencias entre delegado y alcalde. Debido a que las cosas que suceden aquí suelen tomar vuelos considerables y terminan por convertirse en exageraciones lamentables. Y esa preferencia se está cumpliendo gracias al buen entendimiento existente entre Juan Vivas y José Fernández Chacón.

Por lo tanto, el secretario general de los socialistas de Ceuta apenas tiene tiempo de aprender comportamientos que le permitan manejar ciertas situaciones que, sin duda alguna, irán poniéndole a prueba más pronto que tarde. Y ni siquiera le valdrá como excusa su juventud ni, mucho menos, su falta de experiencia. Hablando en términos futbolísticos: tendrá que empezar a rendir desde el primer día y con escaso margen de errores.

Los errores más frecuentes los puede cometer hablando en defensa de la causa socialista frente a los ataques que pondrán en práctica los parlamentarios del PP con el único propósito de sacarle de sus casillas. Pues seguro que éstos, diputado y senadores populares, están ya relamiéndose de gusto con la oportunidad que se les presenta de poder explotar la pasión de quien estrena cargo y responderá a cualquier provocación a vuelta de manivela.

Sí, ya sé que esa actitud de los parlamentarios del PP más que ayudar a la causa de su partido lo que consigue es entorpecer lo antedicho: o sea, que las buenas relaciones institucionales en la ciudad puedan verse dañadas por unas declaraciones desafortunadas entre partes. Y que en esta tierra no están obligadas a ser usadas por necesidades de las urnas.

Pero González, Cucurull y Luz Elena Sanín suelen irse, a veces, por los Cerros de Úbeda. Olvidándose de los intereses de la ciudad y de la ayuda a su presidente. Y es en esta trampa en la cual no debe caer Carracao. De modo que antes de hablar, Carracao no sólo deberá tener el alma libre del tumulto de las pasiones, para elegir las mejores respuestas, sino que también ha de entusiasmarse con la causa y echarle los huevos necesarios.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto