|
Uno de esos amigos que un tiene,
me decía el otro día que me tomo la vida a broma, cuando la
vida es mucho mas seria de lo que yo pienso. Probablemente,
no lo niego, mi amigo lleve razón, pero si no me tomase la
vida a broma viviría en un auténtico calvario.
La vida tomada en serio, con la que está cayendo me parece
hasta ridícula. Arrancar cada día una sonrisa, a todos
aquellos que tienen la gentileza de leerme y que son muchos
más de los que algunos enemigos quieren reconocer, me
reconforta y me siguen dando ánimos para seguir mi camino,
tratando de arrancar esa sonrisa que, en ocasiones, es un
bálsamo para los que lo están pasando mal.
No es que me tome a vida a broma, es que sólo trato de ver
el lado bueno de las cosas, procurando conseguir alguna que
otra sonrisa del lado malo de las mismas.
Es qué, en verdad, me puedo tomar enserio qué toda la
atención esté centrada, en estos momentos, en el Madrid y en
la foto de Soraya. Me parece una incongruencia, que con lo
que está cayendo, el número de parados que aumenta, la
crisis que no hay forma de pararla, los miles de criaturas
que dejarán de cobrar el paro, quedándose si nada en unos
pocos meses y el aumento considerable que se está dando en
los comedores de caritas de personas que no tienen nada que
llevarse a la boca, se pueda centra toda la atención del
mundo mundial, en el Madrid y en la foto de Soraya.
Con ese abanico que se nos presenta de cómo está la
situación crees, en verdad amigo mío, que merece la pena
tomarse la vida en serio y no tratar de conseguir, al menos,
una sonrisa, que palie en algo los malos momento que algunas
criaturas están viviendo.
Si, cada día, consigo arrancar una sonrisa a alguien que lo
esté pasando mal, me doy por satisfecho. No es que me lo
tome todo a broma, es que es preferible reír que no llorar.
Cómo quieres qué me tome en serio la subida que experimentan
cada año los viejos, mientras los que tanto luchan por
nosotros, se suben mucho más. Eso, simple y llanamente, me
parece un mal chiste.
Igual que me parece un mal chiste que si una persona no ha
cotizado los quince años correspondientes, aunque para ello
sólo le falten par de meses no pueda cobrar la jubilación,
mientras sus señorías, los que tanto luchan por nosotros,
con sólo ocho años en sus puestos les quedan toda la
jubilación completa.
Ante esas cosas que me parecen chistes de mal gusto, trato
de mitigarlas y hacer alguna que otra broma que, al menos,
calme los ánimos de todas esas personas que se encuentran en
semejante situación.
No, nunca me he tomado la vida a bromas, me la tomo muy en
serio, pero dada las circunstancias que nos ha tocado vivir,
busco el humor como paliativo a todos los males que nos
acechan y que, en ocasiones, hasta nos impide conciliar el
sueño.
Si en vez de tirar del humor, me dedico a decir lo que nos
espera, la cosa se complicaría y bastantes complicaciones
tenemos ya.
|
OPINIÓN / MIS COSAS
