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Ya desde el final de las doce
campanadas que nos metían en el 2009, se preveía que este
año, que no de gracia, más bien de desgracia, iba a ser,
cuando menos, peligroso para la subsistencia de muchos y
para la buena marcha de todos, comenzando por las primeras
instituciones.
Desde el pasado mes de septiembre, que es cuando, de verdad,
se vieron las orejas al lobo y se lanzó al aire la palabra
CRISIS, salvo para quienes tienen la obligación de mantener
la calma, la alarma estaba sonando.
En las altas esferas del Gobierno se desmentía lo que se
estaba anunciando y poco a poco, aunque siempre por detrás y
a remolque, han ido entrando en razón y aceptando que el
peligro no es que aceche, es que está aquí.
Enero no puede haber sido más catastrófico, especialmente
para esas casi doscientas mil personas que han perdido su
puesto de trabajo. Y febrero puede ser tan malo o peor.
La cifra estratosférica de los cuatro millones, en cuanto a
personas sin trabajo, para finales de año ya la acepta el
Gobierno, lo que quiere decir que esa cifra llegará tres
meses antes, o sea, en septiembre.
Ceuta no puede estar al margen de estos avatares, como
tampoco lo podría estar mi pueblo, ni ningún otro lugar de
España, pero en el caso de Ceuta, de momento, nos consuela
que este fatídico mes de enero haya sido en la comunidad
autonómica, en la que menos ha subido el desempleo, desde
que comenzó el año.
Será un consuelo, pero no es ningún éxito, especialmente
para aquellos que han dejado de tener ese puesto de trabajo
vital para su subsistencia y para la subsistencia de los
suyos.
Se nos dice que el incremento del paro acumulado por la
Ciudad Autónoma fue del 2,7%. En enero, pues, Ceuta
registraba un total de 7238 parados, siendo la autonomía
donde menos ha aumentado el desempleo, a lo largo del año
2008, de todo el territorio nacional.
Los datos, sin embargo, hay que saberlos leer muy entre
líneas, y entonces esos mismos números pueden interpretarse
de formas distintas, según se quiera “tapar” la situación, o
dejarla con toda claridad. Porque cuando se dice que en la
comparación, con respecto al mes de diciembre, Ceuta logra
un balance positivo y reduce en casi 250 personas,
concretamente en 248, la cantidad de los que están en paro,
hay que saber matizar y decir ¿Cómo?. Sí, esa reducción se
ha dado propiciada o vinculada con el plan de empleo
adicional. La cosa es muy distinta a la realidad de poder
cantar victoria.
Está muy complicada la situación y lo peor de todo esto es
que se van poniendo parches, que al poco tiempo se rompen
por otro lado, y así el parcheo no termina, ni siquiera de
enmascarar la situación.
Ahora bien, lo más lamentable de todo esto es que, en los
altos niveles los dos grupos políticos con fuerza no se
llegan a poner de acuerdo, aceptando los que gobiernan que
no pueden dar soluciones sostenibles y dejando aportar su
apoyo a los que están en la oposición.
Es una vergüenza que, en una situación como esta, se paren y
se entretengan en discusiones bizantinas, acusándose uno a
otro de “y tú más”, pero sin mover ficha unos y sin dejar
que la muevan los otros. ¿Tienen unos y otros interés en que
esté solucionado todo?. Sencillamente no, a ambas partes lo
único que les importa es el poder.
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OPINIÓN / EL ESQUINAZO
