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La historia de la comparsa ´Doña Cuaresma’ ha sido de
película de género cómico. La última imagen que ustedes
conservan de esta agrupación femenina se refiere a las
tablas del Siete Colinas, cuando a eso de las 7.00 horas de
la mañana terminaron de cantar para poner punto y final al
concurso de carnaval.
Pero detrás de esas cortinas, en bambalinas, un sinfín de
curiosidades ha caracterizado a una comparsa que, gracias a
la bendición caída desde el cielo por Doña Cuaresma,
consiguió lucir tipo. La historia va de bombos, palabra con
varias connotaciones. Por un lado, les faltaba un
percusionista que tocara este instrumento y, por otro,
varias de sus componentes se quedaban embarazadas y daban a
luz durante los últimos meses de ensayo. Varias
incorporaciones permitieron a esta agrupación, con autoría
de Josemi Romero, salir finalmente al Siete Colinas y
llevarse un tercer premio de mucho sabor. Natalia Barceló es
tenor y Pedro Escámez ‘Perico’, su pareja, coautor de la
música y director del grupo. La semana pasada, Natalia
ingresó en el Siete Colinas cuando varias señales físicas le
indicaban que su hijo quería salir y verles cantar en la
final. Estuvo cuatro días en la sexta planta del hospital,
espectante ante las ecografías que le estaban realizando. El
viernes la pareja vio junta la final del carnaval de Cádiz y
se temían lo peor al día siguiente, que Natalia continuara
ingresada y no acompañara a una agrupación que hubiera
perdido también a Perico, director, guitarra y afinador, es
decir, un órgano indispensable. Pero Adrián decidió esperar
y le dio una oportunidad a sus padres. A las 21.00 del
sábado, menos de una hora antes de que empezara el concurso,
consiguió que le dieran el alta. “Me la dieron los médicos,
no es que yo haya sido una imprudente”, aclara Natalia. “Yo
me encontraba bien, me estaban haciendo pruebas únicamente”.
A su padre también lo conocerán. Se trata de Javier Barceló,
más conocido como Payto, hermano de tres mujeres y padre de
cuatro niñas, Adrián ha sido el primer varón después de
muchos años de féminas en su entorno.
Natalia ingresó el lunes en el hospital nuevamente y el
martes dio a luz mediante cesárea, a eso de las 19.00 horas.
Podrán pensar ustedes, “hay que ver, una pareja tan
carnavalera y que no haya hecho los cálculos para parir en
otra época del año”. Según las previsiones tanto Perico como
Natalia preveían que su hijo naciera en Semana Santa, pero
su concepción se ha adelantado un mes y ahora mismo se
encuentra en la incubadora ganando un poco de peso. Natalia
recordoba que el día de la final estuvo a punto de quedarse
dormida, porque la noche anterior apenas había dormido en el
hospital.
“Mañana -por hoy- todos los ginecólogos y matronas que me
atendieron leerán esto, y quiero decirles que me trataron
estupendamente”. Finalmente, los bombos de Doña Cuaresma
estaban bendecidos y venían con un pan debajo del brazo.
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reportaje
