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sociedad - MIÉRCOLES, 11 DE MARZO DE 2009


musulmanes en la mezquita. archivo.

religion
 

Las mezquitas ceutíes recuerdan el nacimiento del profeta Mahoma

La comunidad musulmana conmemora su
figura con cantos religiosos y la lectura de versos del Corán que explican su historia
 

CEUTA
Fernando M. Caracena

ceuta
@elpueblodeceuta.com

Las mezquitas de la comunidad musulmana celebraron ayer el `Al-Maulud ann baui´ en el que se recuerda el nacimiento de Mahoma. Con motivo de la conmemoración, los centros religiosos estuvieron abiertos durante todo el día y se realizaron lecturas de versos del Corán en los que se cuenta la historia y la personalidad del profeta. “Es una festividad que se celebra con mucha alegría en la comunidad musulmana”, indicó el presidente de UCIDCE, Laarbi Mateis. Durante todo el mes de Rabia, en la mayoría de los hogares se celebra una noche especial en el que se invita al imán de la barriada y a la que acuden coros religiosos.

La comunidad musulmana celebró ayer el Al-Maulud ann baui, la conmemoración del nacimiento del profeta Siedna Muhammad (Mahoma). Con este motivo los fieles se congregaron en las mezquitas y zawias de Ceuta para hacer lecturas de versos del Corán donde se abunda en la personalidad e historia de Mahoma antes y después de ser profeta. En el calendario Hijra, con 11 días menos que el gregoriano usado en occidente, la fecha ha quedado marcada el día 12 del mes Rabia que equivale al 20 de abril del año 571. Antes de la conmemoración del propio nacimiento de Mahoma, desde el primer día del mes de Rabia, en las mezquitas se explica las claves de la vida del profeta y se detallan los motivos, el porqué y el cuando de cada uno de los cinco pilares del Islam: la profesión de fé, la oración, la limosna, el ayuno y la peregrinación a La Meca. Igualmente durante el mes de Rabia, casi todos los hogares celebran una cena especial en para la que es invitado el imán de la barriada y en donde participan escuelas de coros islámicos. Esta tradición está particularmente arraigada en el norte de África en el marco geográfico que incluye Marruecos, Argelia, Libia, Túnez y Egipto. En la zona de Oriente Próximo y Asia suele explicarse la figura de Mahoma a través de ciclos de conferencias y charlas que se fechan durante el mes del nacimiento.

Los fieles y vecinos también se reunieron ayer en las mezquitas para celebrar una comida basada en la carne de ternera y el pollo asado, que según la tradición debe ser sacrificado en los hogares para ser entregado a Dios. La comida es enviada a las casas de enfermos e inválidos para que también puedan participar en la festividad. En las mezquitas acuden estudiantes avanzados del Corán y coros infantiles, que tienen una particular extensión en Ceuta con las comunidades del Imán Malik, Sidi Embarek, Abselam, Almanar o la Asociación Religiosa Masyid Annoor. En las países islámicos es día de fiesta para las administraciones y los centros escolares, aquí en Ceuta, suelen faltar a la escuela los niños que estudian cursos menores a la Educación Secundario Obligatoria.

Pese a que las celebraciones se centran en las mezquitas y centros religiosos, el Al-Maulud ann baui tiene un mayor carácter cultural que religioso. Las festividades religiosas del calendario musulman se restringen a las conmemoradas por el propio profeta: el sacrificio por la culminación del ayuno y el sacrificio en recuerdo del realizado por Abraham a Dios. El Al-Maulud ann baui es una de las tres festividades culturales del mundo islámico junto al Asrawalmi-ray o día de las ascensión de Mahoma y la Achura, conocido popularmente como el día de los reyes del mundo islámico.

Su nacimiento no fue celebrada por Mahoma o los cuatro califas que le acompañaron en vida. Según el historiador egipcio Muhammad Reda conmenzó a conmemorarse tres siglos más tarde de la muerte de Mahoma, mientras que otros autores extienden este periodo dos siglos más.
 


El profeta que nació con los ojos abiertos y la tez clara

Según la tradición islámica, Amina Bentwahb, la madre de Mahoma, dio luz al profeta el 20 de abril del año 571 asistida por la matrona Achi-Ifda, que dijo que nunca había ayudado a un parto tan fácil. Hijo póstumo de Abd Allah ibn Abd al-Muttalib, el profeta nació con los ojos mirando al cielo, las manos abiertas y muy blanco de piel. Cuando lo estaban limpiando después del nacimiento adoptó una postura orante, “Mahoma no fue profeta hasta los 40 años, pero en su entorno ya se sabía que era un niño especial, la noche de su nacimiento hubo una luz diferente”, explicó el presidente de la Unión de Comunidades Islámicas de Ceuta (UCIDCE), Laarbi Mohamed. El primer milagro relacionado con Mahoma ocurrió en su infancia cuando el Ángel Gabriel descendio del cielo, le abrió el pecho y extirpó un coágulo negro para que el niño evitase las tentaciones de Satán.
 

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