PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura
Melilla

Opinión
Archivo
Especiales  

 

 

OPINIÓN - JUEVES, 2 DE ABRIL DE 2009

 

OPINIÓN / LAS NOTAS DEL QUIM

Legítimo o no
 


Quim Sarriá
quimsarria@elpueblodeceuta.com

 

He salido a dar un paseo por el parque central de la ciudad, a pesar de que el cielo promete una ducha, y en muchos lugares del mismo encuentro lo que no debería encontrar a estas alturas del siglo: montones de mierda canina. La gatuna suele desaparecer, en primer lugar porque los gatos parecen seres invisibles desde la llegada de inmigrantes de cierta etnia. No lo aseguro.

Un rincón del mencionado parque está totalmente cubierto de fina hierba donde mucha gente se sienta, estos días de mal tiempo no, pero sin embargo es invadido por animales de dos y cuatro patas que hacen sus necesidades en el mismo, sobre todo los perros, a pesar de que existen carteles que prohíben la entrada de animales de cuatro patas sueltos o no.

Estoy pensando en crear una sociedad protectora de personas.

Bueno, saquemos adelante el verdadero motivo de la nota de hoy.

Cabe destacar la influencia de algunos entes usuarios y propietarios (?) de enormes templos semivacíos sobre el sentimiento de la gente para provocar reacciones previstas en ella.

La polémica suscitada por el Conferencia Episcopal por la remodelación de la ley del aborto ha resultado a todas luces bastante descafeinada.

La fijación oral que tienen sobre que un embrión de 40 semanas es una persona nos da a entender que el mencionado embrión puede vivir su vida independientemente. Agresiva campaña la comenzada por los episcopales y refrendadas por ancianos y cleros que no están en condiciones de tener hijos y, por lo tanto, no pasan por el proceso… deberían cerrar la boca porque no están en condiciones, moralmente, de opinar.

No entiendo esa manía. Si hace 25 años que tenemos la ley del aborto, durante el mandato de la derecha se realizaron más de medio millón de abortos, y nadie puso el grito en el cielo… ¿cómo es que ahora lo hacen?

Los cambios que se pretenden hacer en la ley existente son cambios destinados a mejorar la calidad del sistema. Es preferible aceptar la voluntad de la persona, la mujer, antes que hacerla una delincuente por abortar clandestinamente o una víctima que engrose las estadísticas de muertes. Quieran que no los de la Episcopal, el aborto es y será una realidad siempre, tanto bajo el amparo o no de la ley, esté como esté redactada.

Si los de la Episcopal están empeñados en que los FETOS son personas hechas y derechas… que no se hable más y cojan ese aparato que se llena de agua y que los utilizan para bendecir, algunos curas lo utilizan como porra, lo introduzcan donde está el feto y los rocíe bendiciéndolo para después bautizarlo dentro del útero. Una chorrada ¿verdad?, eso es lo que hacen los de la Episcopal metiéndose en camisa de once varas. Máxime cuando se trata de la muerte de un recién nacido dentro del período de 12 o 24 horas, no recuerdo bien, entonces no es considerado como persona y no se puede inscribir en el registro como tal.

En cuanto a las niñas de dieciséis años…, supongamos que Vd. tiene una hija de 16 años y se queda embarazada. Ella quiere quedárselo y Vd. quiere que aborte. ¿Cuál criterio prevalece, el del padre o el de la hija? Lo mismo podría plantear en el caso contrario y en el del proceso de fabricación del embrión. ¿La hija ha pedido permiso al padre para follar? No, desde luego que no… por tanto al ser una decisión individual tendremos que aceptar que la decisión que tome posteriormente no necesita el correspondiente permiso, inexistente por otra parte.

Permitamos que las cosas maduren, que la gente vea de otra manera estas cosas y dejemos atrás aquellos tiempos tenebrosos del pañuelo negro en la cabeza y del vestido negro sobre el cuerpo signos de una total sumisión de la mujer hacía el hombre. Las cosas han cambiado y ningún hombre, mucho menos los que visten falda y cubren sus cabezas con bonetes, tiene derecho a decidir sobre la mujer. Hay que respetar su voluntad.

Dejemos que la ley siga su curso, muchos lo agradecerán. Más aún en estos tiempos crueles.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto