PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura
Melilla

Opinión
Archivo
Especiales  

 

 

OPINIÓN - MARTES, 28 DE ABRIL DE 2009

 

OPINIÓN / SNIPER

La guerra de Irán
 


José Luis Navazo
yebala06@yahoo.es

 

Ignoro, naturalmente, si en algún momento y previo el “nihil obstat” de Washington, Israel atacará de forma preventiva las instalaciones nucleares de la República Islámica de Irán, como a punto estuvo de hacer en julio del pasado año bombardeando, mediante tres hipotéticas penetraciones aéreas (finalmente reducidas a dos, a fin de no sobrevolar el espacio soberano jordano) a cargo de unos cincuenta F-15 y F-16, las zonas de Arak (producción de agua pesada y plutonio) Natanz (con múltiples centrifugadoras para el enriquecimiento de uranio) Ispahán (unidad de conversión de uranio) y Bushehr (con su reactor nuclear de origen ruso), lugares donde se concentrarían la mayor parte del centenar de centros y diversas instalaciones que los iraníes han dispersado por su geografía. Sin embargo el titular no andaría descaminado, pues de forma interpuesta en ocasiones (en Oriente Medio a través de sus brazos armados de Hamás y Hezbolá) y en otras con una agresiva política misionera (en Marruecos sin ir más lejos), el Teherán de los ayatolás no ha dejado de tejer desde el derrocamiento del Shá y la llegada de Khomeini al poder una espesa tela de araña en nombre de la revolución islamista mundial, lanzando en los últimos años con el islamofascista Ahmadinejad una espesa cortina de humo intentando, como fuere, ganar un tiempo precioso a fin de poder hacerse con armamento nuclear.

Mientras a mediados de junio de 2008 el ejército israelí organizaba en cooperación con el griego unas complejas maniobras de rescate de pilotos y comandos en el Mediterráneo Oriental a 1500 kms. de la costa de Haifa (precisamente la misma distancia que separa Israel de Irán), el 11 de julio la última gran empresa occidental en Irán, la compañía francesa “Total”, abandonaba sus cuantiosas inversiones en el enorme campo petrolífero de South Pars, a la vez que norteamericanos e ingleses cooperaban con las fuerzas armadas del Emirato de Bharein en ejercicios de simulación de protección de instalaciones petroleras y de gas en caso de un ataque iraní… Paralelamente los días 9 y 10 de julio, los Guardianes de la Revolución Iraníes comandados por Mohamed Ali Jaafari acometían el ejercicio militar “Gran Profeta 3”, lanzando con éxito misiles “Shahab 3B” de 16 metros de largo (basados en los chinos “No Dong”) capaces de transportar hasta 2.000 kms. de distancia (pudiendo alcanzar por tanto a Israel) una cabeza explosiva de 1 tonelada (recordemos que los Shahab 1 y Shahab 2, con tecnología Scud, solo tenían un alcance de 300 y 500 kms. respectivamente).

¿Quién frustró el ataque israelí…?. Quien puede: los Estados Unidos, negándose fundamentalmente a que la aviación hebrea sobrevolase el espacio aéreo irakí. Actualmente y con el presidente Obama en la Casa Blanca, el espectro de un ataque a Irán parece alejarse en principio, al menos hasta el desenlace de las próximas elecciones en el país que coinciden, curiosamente, en el mismo día que las marroquíes, el 12 de junio. Escaso margen de maniobra, pues disponiendo ya Teherán en la práctica de combustible nuclear el paso para obtener armamento atómico es muy corto. Y entonces Occidente (no ya solo Israel) poco podrá hacer… Recuerden los lectores la política de apaciguamiento con Hitler, tan “éxitosa” en su momento, vendida por Chamberlain y Daladier… Pues eso.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto