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La Policía Local recibe esta mañana la Medalla de la Ciudad
en su categoría de Oro, una distinción que ya le dieron a
Policía Nacional y Guardia Civil en los pasados años. El
acto se desarrollará a las 13.00 horas en el Palacio
Autonómico, con la presencia del presidente Juan Vivas.
Antes, a las 12.00, se inaugurará en la barriada de Loma del
Pez la calle Juan Carlos Arriaga, en memoria del policía
fallecido en acto de servicio hace 16 años. A las 11.00 se
celebrará una misa en la Catedral.
Ángel Gómez ha insistido en todas sus entrevistas que hoy
recogerá la Medalla de Oro de la Ciudad en nombre de todos
los funcionarios, ni siquiera se atreve a resaltar a alguno
de los históricos dentro del cuerpo. “Este premio es para
todos los policías”, insiste. Aunque le pese, el
protagonismo recaerá hoy sobre él y será el encargado de
pronunciar un discurso en nombre de los 137 años de
historia, desde aquellos que constituyeron la Guardia
Municipal en 1872, hasta los últimos, los de la Unidad de
Intervención Rápida (UIR), última sección creada. Gómez
también ha repetido que supone un “orgullo” que todo el
pleno de la Asamblea haya votado por unanimidad a favor de
la Local. La historia del superintendente jefe dentro de la
Policía Local se remonta 28 años atrás. Fue en 1981 cuando
aprobó unas oposiciones para ocupar el puesto de jefe. Otras
seis personas compitieron con él, pero el destino quiso que
quien fue en una etapa anterior inspector del Cuerpo
Superior, tuviera el privilegio de asentarse dentro de Ceuta
y lo hiciera como máximo mando funcional de la Policía.
Durante los casi 30 años de carrera, sólo abandonó el puesto
en dos ocasiones: la primera, cuando ocupó el cargo de
director de la Academia durante ocho meses, y la segunda,
cuando se pasó dos años como director general de
Gobernación.
Su llegada coincidió con la revolución del cuerpo a nivel
estatal. En Ceuta se notó de manera especial. El Gobierno de
Ricardo Muñoz fue el primero que apostó por la Policía
Local, hizo una revolución”, asegura. Pero tampoco quiere
dejar de reconocer la labor del actual Gobierno “y no lo
hago por demagogia”. “Han demostrado tener una especial
sensibilidad hacia nosotros. En el último mes han
incorporado dos sonómetros, nos han dado nuevos coches,
furgones de la UIR y un sistema Tetra de comunicación que le
va a costar más de un millón de euros”, explica. “El gran
avance técnico de los últimos tiempos ha sido el gran
logro”, asegura. Tampoco quiere dejar de agradecer a la
Federación de Vecinos la proposición que hizo a la Ciudad
para que el cuerpo fuera galardonado. Además, gracias a las
encuestas de esta entidad, asegura Gómez, “los agentes
sabemos que estamos bien valorados por la sociedad”.
Durante su estancia en Ceuta, este vallisoletano revela que
en sus 28 años ha aumentado el cuerpo de los 153 a los 320.
“Las necesidades de la sociedad han obligado a ello. Hay más
coches - de 7.000 se ha pasado a 50.000-, más problemas, más
población”. “Nunca llegaremos al 100 por cien, porque
nuestra tarea es una constante, luchamos porque la sociedad
viva en orden y si lográramos el 100 por cien habríamos
conseguido erradicar totalmente la delincuencia, las
conductas antisociales, pero esto es una utopía”.
Gómez calificó el día que va a vivir hoy como el “más
importante” de su carrera. “Lógicamente, recibir un premio
como éste significa un reconocimiento al esfuerzo y
sacrificio hecho a diario -destacando especialmente la
labora sacrificada de la unidad de tráfico”. “He tenido días
importantes, pero no tantos como este”, agrega. De su
trayectoria, Gómez resalta como el día más trágico el
fallecimiento de Juan Carlos Arriaga en 1993. Hoy se le
rendirá homenaje, con la inauguración de una calle en su
nombre, en la barriada Loma del Pez. Será un día inolvidable
para todos.
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galardon
