PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura
Melilla

Opinión
Archivo
Especiales

 

 

cultura - DOMINGO, 31 DE MAYO DE 2009


El acto dió comienzo con una misa. a.s.

Ceremonia
 

San Agustín despide con una imposición de bandas a sus
alumnos de bachillerato

El acto dió comienzo con la concelebración de una Solemne Misa en el patio del Colegio presidida por el padre Álvaro Martín
 

CEUTA
José Manuel Rincón

ceuta
@elpueblodeceuta.com

Finaliza mayo y con él prácticamente se da por concluido el presente curso escolar 2008/2009, y siempre que llega esta fecha, el Colegio San Agustín se engalana para despedir, con un emotivo acto, a los alumnos que durante años han cimentado sus pilares en este centro para ser futuros hombres y mujeres de provecho.

Ayer por la tarde, a las 20.00 horas, el patio del colegio San Agustín acogió un emotivo acto de despedida de un total de 46 alumnos de 2º de Bachillerato, los cuales han finalizado los estudios que durante años han ido cursando en este centro docente regentado por padres agustinos.

Un gran número de familiares y amigos de los chavales asistieron a este emotivo acto que dió comienzo con la concelebración, por parte de los padres agustitnos, de una solemne misa que fue presidida por el director del centro, el padre Álvaro Martín.

Tras la Misa, el acto continuó con unas sentidas palabras pronunciadas por el padre Álvaro, el cual animó a los chavales a seguir ampliando los conocimientos adquiridos durante su etapa en el centro agustino y a ser hombres y mujeres de provecho, llevando a gala los valores inculcados durante todos estos años.

Posteriormente, le tocó el turno a uno de los alumnos en representación de todos de pronunciar unas palabras también de despedida y de agradecimiento por la paciencia y el empeño de los profesores del centro en conseguir educarlos, llegando incluso a arrancar la risa en algunas partes de la alocución gracias a anécdotas o curiosidades vividas.

A partir de ahí, los aplausos comenzaron a sonar y no pararon hasta que el último estudiante terminó con la banda impuesta.

Uno por uno fueron nombrados y estos acercándose hasta los profesores que han estado junto a ellos durante esta última etapa en el colegio, eligiendo ellos mismos cual sería el profesor que le impusiese la banda, algo que casi siempre se decide por el cariño o afinidad que tenga con el mismo.

Finalmente, una vez finalizado el acto, donde los flashes no pararon de saltar a cada segundo para inmortalizar el momento, se dirigieron a un céntrico restaurante para continuar la fiesta.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto