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Tanto CCOO como CSI-CSIF emitieron ayer sus respectivas
notas de prensa, aunque ambas en términos muy similares, al
relacionar estos hechos con el rechazo inicial de UGT hacia
la creación de los cuerpos de Agentes de Movilidad y Agentes
Medioambientales en el colectivo de Vigilantes de Servicios
Generales.
Así, la Sección Sindical de CCOO en la Ciudad Autónoma dijo
respetar el posicionamiento de UGT en contra de la creación
de ambos cuerpos en el seno de los Vigilantes de Servicios
Generales como una categoría más dentro de la escala básica
en el Reglamento de la Policía Local, alegando para ello
“razones de ilegalidad”.
“Es su decisión y hay que aceptarla”, continuó diciendo CCOO
en su nota, que recordó no obstante su postura a favor
porque “entendíamos que así debía ser como cuerpo auxiliar
de la Policía Local que es, adscritos a su organigrama de
trabajo, dependiendo de los mismos mandos, y con un régimen
disciplinario y sistema de servicios y turnos idénticos”.
CCOO quiso puntualizar que “reprochamos cualquier actitud y
comportamiento que se exceda de lo cívico”, de modo que “si
realmente hubieron palabras fuera de tono, no tenemos más
que condenar el hecho y estar en total desacuerdo”. No
obstante, “hay que valorar su una discusión entre partes es
óbice para manchar a un colectivo que empieza una nueva
andadura con ilusión, dando a entender a la opinión pública
que carecen de principios”.
“No consideramos que el camino de manchar públicamente el
nombre de un colectivo sea el camino adecuado”, agregó CCOO,
que consideró “desacertado” el hecho de que UGT calificara
de “matones” a los vigilantes de servicios generales
“previniendo a la ciudadanía, dudando de lo que serán
capaces de hacerles”.
Así, el sindicato comisionista recordó que, en los 15 años
que han transcurrido desde la creación del Cuerpo de
Vigilantes de Servicios Generales, no se ha registrado
“ninguna denuncia hacia algún componente de este cuerpo por
conducta inapropiada hacia ningún ciudadano”, por lo que
consideró “irresponsable” la postura de UGT al hacer esta
reflexión.
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