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Los servicios de rescate de Cruz Roja y de la Guardia Civil
buscaron ayer durante cuatro horas a un hombre que se
internó en el agua, en la playa del Tarajal hacia las 12:30
horas. Unos pescadores alertaron de su desaparición al ver
que no regresaba y cuatro horas después fue localizado por
la lancha de la Benemérita cuando regresaba a nado desde
Marruecos. Se trata de un súbdito holandés nacido en
Marruecos.
El extraño comportamiento de un ‘bañista’ mantuvo ayer en
jaque durante cuatro horas a los servicios de rescate en el
mar de Cruz Roja y de la Guardia Civil. Según el relato de
testigos presenciales, el hombre se internó en las aguas de
la playa del Tarajal hacia las 12:30 horas a pesar de los
avisos de algunos pescadores que le advirtieron del peligro
que suponía la intensa niebla reinante a esas horas y que
conllevó la izada de la bandera roja en la playa. Al ver que
no regresaba, una media hora después de haber dejado su ropa
escondida en las rocas de la escollera que separa la playa
de la frontera, los mismos pescadores dieron la voz de
alarma en el puesto de la Cruz Roja.
Tal como comprobó EL PUEBLO, la entidad humanitaria desplegó
un dispositivo de búsqueda con dos embarcaciones zodiac y
personal a nado. Ante la imposibilidad de localizar al
hombre, se pidió apoyo a la Guardia Civil, el 061 y
Bomberos, coordinados por el 112. A las dos lanchas de los
GEAS se añadieron efectivos de la frontera que en algunos
momentos rastrearon el agua con los prismáticos.
Finalmente, una de las zodiac de la Guardia Civil trajo a
tierra a un hombre que encontraron en el mar sin saber que
se trataba del que se estaba buscando. Al llegar a tierra,
los testigos le identificaron y aunque no disponía de
documentación más tarde se comprobó que era español y
residente en Zamora. El protagonista del suceso se mantuvo
tranquilo y explicó a los agentes que se “desorientó” en el
agua, que había venido a Ceuta a “buscar trabajo” y que su
coche, un Citroën del cual guardaba las llaves entre los
efectos que dejó en la playa, se encontraba estacionado en
la zona de la Feria. Tras comprobar su filiación, se le dejó
en libertad.
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