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El grupo UPyD ha propuesto que el Día de Melilla, en lugar
de celebrarse el 17 de septiembre, se conmemore en “otra
fecha simbólica que aglutine a todos los melillenses por
encima de las ideologías políticas” con el objeto de evitar
la polémica que suscita la fecha actual al conmemorar “un
acto de sangre”.
En su opinión, es “ilógico seguir alimentando esa polémica”,
máxime cuando “la mayoría del Pueblo de Melilla no le da
importancia a eso”. Por esta razón, Guerra mostró la
predisposición de UPyD para buscar “otra fecha más
cohesionadora para los tiempos que corren” para celebrar el
Día de Melilla. Así, aunque la formación upedista considera
que el 17 de septiembre es “una fecha histórica”, Guerra
defendió que también puede haber otros días históricos
“válidos para poder consensuar” la celebración del Día de
Melilla, como por ejemplo, el 13 de marzo, para conmemorar
el aniversario del actual Estatuto de Autonomía.
Apoyo al 17-S
En cualquier caso, Guerra mostró su desacuerdo con CPM por
el rechazo que profesa al 17 de septiembre, al recordar que
“hoy estamos donde estamos gracias a ese acontecimiento de
1497”, cuando Pedro de Estopiñán llegó a Melilla para
adherirla a la Corona de Castilla.
No obstante, también puntualizó que el 17 de septiembre es
el Día de Melilla desde poco más de diez años, ya que se
eligió esa fecha “por un brote de nacionalismo que surgió en
Melilla”. Por este motivo, instó al Gobierno local a “no
rasgarse las vestiduras” por la sugerencia de CPM y PSOE de
cambiar la fecha, dado que “no tiene tradición”.
En este sentido, advirtió al Ejecutivo de la Ciudad Autónoma
de que “se está equivocando” con su postura unilateral de
mantener el Día de Melilla tal y como está en la actualidad,
ya que “hay cuestiones que no se pueden plantear por mayoría
absoluta, sino que nacen para ser intemporales y por eso hay
que consensuarlas”.
Guerra también instó al presidente melillense, Juan José
Imbroda, a realizar un discurso que “no sea un mitin”, sino
que sea “abierto, tolerante e integrador”, aunque desconfió
de que finalmente eso vaya a ocurrir porque “es un
planteamiento muy distinto del que suele realizar Imbroda”.
Así, criticó que el acto conmemorativo del Día de Melilla,
tal y como los plantea Imbroda y su Gobierno, es “un acto
involucionista, de exaltación a un españolismo rancio y a su
persona”. Sobre esta cuestión en concreto, el líder magenta
recordó que Imbroda, en su discurso del Día de Melilla del
año pasado, “prometió 400 puestos de trabajo inminentes y
aún los estamos esperando”, lo que en su opinión supone “un
engaño a los melillenses”.
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