|
LUNES. 5
Recibo una carta del Establecimiento Penitenciario de Ceuta,
firmada por su director, Juan Hernández Rebollo. En
ella, me agradece mi asistencia al acto celebrado en honor
de la Patrona de los funcionarios, el pasado 24 de
septiembre. Y se satisface que yo haya aireado que me lo
pasé muy bien durante la copa de vino que fue servida en el
Hotel Tryp. En la misiva, Hernández Rebollo, me indica el
desconocimiento que la gente tiene en relación con la labor
que desarrollan los funcionarios. Debido, cómo no, a que es
una tarea que se desarrolla en recinto cerrado y,
lógicamente, falto de accesibilidad. Y me explica que las
más de las veces, los ciudadanos en general tienen una idea
de las prisiones por lo que ven en las películas: Clichés y
estereotipos que no reflejan la realidad penitenciaria
actual. A partir de ahí, el director tiene la amabilidad de
destacar la columna que le dediqué al acto, con fecha 25. Y
hace extensivo su agradecimiento a este periódico. Ya que en
la miscelánea semanal también le dedicamos el espacio
correspondiente. Y termina dándonos las gracias en nombre de
los funcionarios y en el suyo... De nada, estimado director.
Porque, gracias a ese día, tuve la oportunidad de conocerte
y charlar contigo.
MARTES. 6
Fue en agosto, durante las fiestas de la Patrona de Ceuta,
cuando varios alcaldes y concejales de la provincia gaditana
fueron invitados a la Feria. Vinieron el alcalde de El
Puerto de Santa María, Enrique Moresco; Fernando Gago,
ex alcalde, y actualmente teniente de alcalde responsable
del Área de Turismo; y Millán Alegre, concejal de
Cultura. De mis tres paisanos, debo decir que fue con
Fernando con quien pasé años de adolescencia estudiando en
la Escuela de la Pescadería, dirigida por los jesuitas.
Fueron años de asistencia a un colegio extraordinario. Y
sitio donde pude comprobar las muchas virtudes que adornan a
FG. El cual ha conseguido ganarse la confianza de Juan
Vivas y Pedro Gordillo, debido a los encuentros
mantenidos con ellos. Pues bien, cuando ya me quedaba muy
lejos mi presencia en la comida con que nos obsequió la
ciudad, en ‘La Dehesa’, y la cena, en ‘El Varadero’, he
recibido una fotografía enviada por la oficina de protocolo,
acompañada de una tarjeta de Juan Vivas. Una fotografía
donde aparezco junto a Gago y Millán Alegre. Gracias, pues,
a quienes me han enviado tan buen recuerdo de aquel
estupendo día.
MIÉRCOLES. 7
Coincido con el director de Viajes Flandria, Pedro
Palenzuela, y nos ponemos a charlar sobre la cantidad de
viajeros que han pasado la semana pasada por el Hotel Tryp.
Portugueses y alemanes que han venido en viajes organizados
por la agencia que él dirige. La magnífica labor que viene
desarrollando viajes Flandria es incuestionable. Así lo
reconocen quienes siguen de cerca todo lo concerniente a
cuestiones turísticas. Pedro, siempre atento a facilitarme
datos al respecto, me anuncia que entre el 8 y el 12, el
llamado puente del Pilar, 160 personas se alojarán en el
Tryp. Y 90 serán las que lo hagan en el Ulises. También me
pone al tanto de los muchos grupos que visitarán la ciudad.
En fin, que una vez más me complace destacar la mucha
influencia que esta empresa tiene en menesteres turísticos.
Tarea que debiera ser reconocida por quienes están obligados
a hacerlo. Y que al parecer no ponen el menor interés en un
hecho tan evidente. Cualquier día habrá que preguntarle los
motivos a los que rigen los destinos de esa consejería.
(Pedro, enterado de tu indisposición, consecuencia de tanto
trajinar diariamente, espero que te hayas recuperado. Un
abrazo y mis mejores deseos)
JUEVES. 8
Coincido con Mohamed Alí en el Hotel Tryp. Y nos
ponemos a charlar. Abro yo la conversación preguntándole por
qué motivo viene dando la sensación de que está quemado
políticamente. Y me explica que él llegó a la política sin
ánimo de lucrarse en ningún sentido. Dispuesto solamente a
trabajar de lo lindo para que sus ideas cuajasen a favor de
todos los ceutíes. Pero que transcurrido ya bastante tiempo
ve que la cosa no funciona como él pensaba. Se lamenta de no
dedicarle las horas que desea a sus dos hijos, ambos en
edades que necesitan de su atención. Y, sobre todo, se
muestra desengañado en muchos aspectos. Con lo cual a veces
se viene abajo y piensa en que alguien, con más ánimos que
él, pueda sustituirle. Mi respuesta no se hace esperar. Y le
digo al líder de la UDCE-IU que bien haría en recapacitar
sobre sus actuaciones desde que consiguió su éxito en las
urnas. Que ir contracorriente nunca es bueno. Máxime si los
contrarios tienen mayoría absoluta. Que ya va siendo hora de
que actúe acorde a las circunstancias. Y, desde luego, le
anticipo que cometería otro grave error si se sigue
empeñando en darle entrada en su redil a personas que en
cuanto ocupen un cargo lo primero que harán es llevárselo
calentito. Que es lo que hicieron siempre que disfrutaron de
un puesto de concejal. Conversación interesante con Alí. El
cual se mostró, como es habitual en él, muy amable conmigo.
Ah, que nadie crea que mi interés radica en que Mohamed Alí
no fiscalice al Gobierno presidido por Juan Vivas.
VIERNES. 9
La Casa de Ceuta en Barcelona ha decidido concederle el
Premio ‘Caballa del año 2009’ a este periódico. Un periódico
que acaba de cumplir 14 años de existencia y se muestra con
esa pujanza que tiene todo lo que está casi recién nacido.
La entrega del galardón será el 14 de noviembre.
Aprovechando el treinta aniversario del Día de Ceuta en
Barcelona y la cincuenta y tres celebraciones de la
Fundación de una entidad cuyos miembros viven diariamente el
ser ceutí. ‘El Pueblo de Ceuta’ será homenajeado en una cena
institucional que se celebrará en el Hotel Barcelona Plaza.
Un acontecimiento del cual nos alegramos quienes sabemos de
qué modo se está luchando diariamente para combatir a
cuantos procuran por todos los medios limitarnos nuestro
hacer con el único fin de cundir la desmoralización. Pero
han dado en hueso. Lo tienen crudo. Felicidades al editor
por la concesión de tal galardón.
SÁBADO. 10
El viernes 2 de octubre, día de Los Ángeles Custodios, la
Policía Nacional celebró la fiesta de su patrón en el Hotel
Ulises. Y, dado que fui invitado, allí estuve un año más
para beberme la copa de la amistad con los policías. Una
copa amenizada con la alegría de las conversaciones de
cuantas personas acudieron al acontecimiento. Andaba yo
charlando con el delegado del Gobierno, José Fernández
Chacón, cuando Luis Manso se acercó a nosotros. Y
lo primero que dijo, tal vez dejándose llevar por la euforia
del momento, es que el delegado del Gobierno y yo éramos las
personas más importantes de la ciudad. Noté el calor del
sonrojo y sólo me dio tiempo a responder con balbuceos. Pero
Manso volvió a la carga, destacando cualidades mías y
haciendo proselitismo de mi manera de ser. Tantos elogios, y
tan desmesurados, me pusieron en guardia. A pesar de que mi
comportamiento con el coronel había sido siempre exquisito.
No sólo en el trato personal sino dedicándole columnas y
escritos en los que destaqué sus bondades. En realidad, no
me gustó ni un pelo la situación que viví, repito, junto al
delegado del Gobierno. Y acerté. Porque, días después, pude
comprobar cómo se tergiversaban unas palabras mías al
coronel, cuando pude recobrar el tino, y también el uso que
el desaseado Vicente Álvarez hacía de mi estar con el
delegado del Gobierno. Al coronel Manso, tras felicitarle
por su trabajo acerca de la Policía Nacional en la prensa,
le recordé que bien merecía este periódico su atención en
algún momento, aunque fuera por mi comportamiento hacia él.
Y continué charlando con Fernández Chacón ante su presencia,
ante la presencia de Manso, como yo suelo hacerlo con todo
el mundo. Quiero seguir pensando bien de mi estimado Luis
Manso y mal de quienes lo han dejado, quizá por hablar él
más de la cuenta, en una situación muy desafortunada ante
mí.
|
OPINIÓN
