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OPINIÓN - MARTES, 20 DE OCTUBRE DE 2009

 
OPINIÓN / EL ANÁLISIS

No me gustó el árbitro, pero el Ceuta menos

Por Jesús Carretero


Es, a partir de esta doble perspectiva, como puedo analizar el partido que el domingo jugó en tierras murcianas, en el campo Las Torres, de Picote, el Ceuta

Y es que el equipo caballa no entró en Murcia, se quedó a diez kilómetros de la capital de la Comunidad Murciana, y a años luz de lo que tenía que hacer para sacar adelante un partido, no fácil, pero salvable y con ello ahora hubiera sido el líder del grupo.

Desde muy pronto se vieron dos cosas, la primera que el Ceuta salió con un talante muy distinto a como salió ante el Polideportivo Ejido, por ejemplo, y la segunda que el colegiado García Castillo, dicen que muy experimentado en la categoría, hacía el arbitraje a su manera, sancionaba con “leal saber y entender”, pero equivocándose constantemente, o pitando cosas que sólo el parecía ver.

De todas formas, dejando de lado al trencilla, el Ceuta no fue capaz de entrar en el partido y su punto flaco estuvo, en toda la primera parte, especialmente, en su banda derecha, por la que entró el extremo izquierdo (por utilizar la terminología de cuando había ese tipo de jugadores) se fue en doce ocasiones, creando las ocasiones más peligrosas a favor de los de casa.

Esa zona del campo fue dominada y controlada por el Murcia, sin enterarse el Ceuta, y en contadas ocasiones se frenó al jugador que entraba por ahí.

A lo largo de todo el primer tiempo, además de la ocasión que terminó en el primer gol, tras una falta y el corner siguiente, los locales llegaron con peligro en otras tres ocasiones, en las que el meta Ramón salvó, cuando menos, de otro gol más.

En todo ese tiempo, el Ceuta no tiró ni una vez con peligro a la meta del cancerbero Pulpo. Así se puede empatar, a cero, pero no se puede ganar.

En la segunda mitad hubo más juego, pero el Ceuta siguió tan romo como en la primera parte y es que, si se te presentan un par de ocasiones y las fallas estrepitosamente, luego después ya no se puede hacer mucho.

Además, en esta ocasión, los cambios que efectuó Carlos Orúe no dieron todo lo que él esperaría de ellos, y si bien es cierto que Javi Gómez, que reemplazó a Javi Navarro, en los primeros instantes parecía que iba a dar guerra al contrario, al final se quedó en eso, en un auténtico bluff que falló una ocasión, la primera que tuvo el Ceuta, y a partir de ahí habló mucho, pero jugó muy poco.

En este segundo tiempo, además de la ocasión de Javi Gómez, ya comentada, tuvo una clarísima Aarón, quien solo ante la portería echó el balón fuera.

Hemos comentado dos ocasiones del Ceuta y nos falta otra, en el minuto 19 del segundo tiempo, cuando Pepe Martínez sacó una falta que hizo estirarse al meta Pulpo.

Fuera de esto, no podemos comentar ninguna otra ocasión del Ceuta, mientras en los locales, además de los 3 goles marcados, en el minuto 32 Matías Alonso estrelló el balón en el larguero de la meta de Ramón, y ya antes Pico había disparado con peligro un balón que salió rozando el poste.

Con todo ya resuelto, con los tres tantos en el marcador, en el minuto 90 hubo otra ocasión más del Murcia “B”.

Sin entrar en más detalles, fueron muchas las ocasiones que crearon los locales, y muy poco lo que inquietó el Ceuta, que se ha quejado de que el primer tanto llegó tras una falta más que dudosa. Yo incluso creo que ahí no hubo falta, pero esa falta se sacó, el balón fue a corner, y poco tiene que ver esa falta con la descolocación que tuvo la defensa ceutí para que rematara, a placer, Rojas y así inaugurara el marcador.

Tampoco me sirve la justificación de que el campo fuera de césped artificial y chico, porque ese césped es igual para todos, además de que durante las últimas semanas el Ceuta ha estado entrenando en un campo así, por la resiembra de Alfonso Murube.

Lo único positivo que se debe haber sacado de este encuentro es que debe servir para que en el futuro se salga a ganar en todas partes, que el Ceuta puede estar arriba, pero trabajando, y que un equipo desdibujado, dehilvanado y sin nervio no va a tener fácil estar entre los cuatro primeros, a pesar de que el grupo es ..., como es.

Dando facilidades, estando sin sitio, jugando como en el patio de un colegio y no yendo, desde el primer instante, por la victoria, puede encontrarse el Ceuta con más sorpresas, porque el grupo es flojo, muy flojo, pero nadie regalará nada, ni el nombre va a apabullar a ningún otro, por muy modesto que sea.

Y sobre la expulsión del técnico ceutí, a instancias del auxiliar, no sé por qué sería, posiblemente porque dijera algo, conociendo a Carlos Orúe no creo haya dicho nada injurioso, ni ofensivo, a lo sumo podría haber dicho lo que todos vimos, que el árbitro era “como la carne pescuezo”, y ni siquiera diría eso.

Este lance, a lo sumo, sería la anécdota de un mal día en tierras murcianas.

No dio para mucho más un encuentro como ese, menos mal a que por su horario nos permitió pasar la tarde libre, que si además perdemos la tarde viendo eso “apañaos” hubiéramos estado.
 

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