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Tras asumir que el consultorio del barrio ha pasado a manos
de otro médico de familia, los vecinos de Benzú inician otra
batalla para mejorar la asistencia sanitaria en el enclave.
El consultorio de Benzú, que depende del centro de salud de
Otero, sólo presta asistencia médica los lunes, miércoles y
viernes de cada semana.
Ahora los vecinos de este barrio, con más de 1.200
residentes, quieren que el Ingesa les proporcione atención
primaria todos los días laborables de la semana. Lo que en
la práctica supone ampliar el servicio a los martes y jueves
de cada semana que no caigan en festivos.
“Ahora, si nos indisponemos un martes o un jueves tenemos
que acudir hasta el centro de salud, bien tomando un autobús
que te deja en Puertas del Campo o bien tomando un taxi que
puede costarte entre quince y veinte euros”, explicó un
vecino del barrio, Antonio Anillo.
Los vecinos tienen pensado trasladar la petición por escrito
al Ingesa y, si no, recurrirán al Ayuntamiento o a la
Delegación del Gobierno.
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