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Llegaron de Pekín y pasaron poco más de 24 horas en la
ciudad autónoma, un tiempo suficiente para comprobar in situ
que “un espacio tan pequeño permite una concepción única
sobre los diferentes estilos arquitectónicos que han
aportado cada una de las civilicaciones que han vivido en
esta tierra”. Hoy ya están en Sevilla y la próxima parada
será Lisboa. Son arquitectos y dejan Ceuta “con buen sabor
de boca”.
Un día recorriendo las calles de la ciudad les ha bastado
para poner sobre la mesa varias reflexiones acerca de los
parámetros arquitectónicos de un espacio que les ha
“sorprendido gratamente”. Medio centenar de arquitectos de
nacionalidad china han recalado en Ceuta como parte de un
viaje que tiene por objetivo conocer de primera mano las
joyas arquitectónicas del sur de la península ibérica “y por
qué no incluir a Ceuta que tiene tantas reminiscencias de
diferentes culturas que confluyen en un mismo sitio”, pensó
uno de los organizadores del viaje, de origen portugués y
que trabaja para una de las revistas de arquitectura más
prestigiosas del país nipón.
“Después de visitar Ceuta vamos a Sevilla y también
conoceremos Lisboa y creo que visitar esta ciudad nos ha
aportado una visión más amplia de la arquitectura española”,
apunta. A su lado, los arquitectos comentan que “Ceuta se va
agrandando como un árbol que cada vez se pone más bonito y
conseguir eso no es fácil”, apuntan. Les han maravillado las
Murallas Reales, pero sobre todo el poder observar la
confluencia de arquitecturas en un espacio tan pequeño “pero
tan singular tanto paisajísticamente hablando como a nivel
humano”.
Muchos estilos, poco espacio
Dicen que pocas ciudades posibilitan, en un espacio tan
reducido, una concepción histórica de los estilos de todas
las civilizaciones que pasaron por aquí. También dicen que
la ordenación y el planeamiento que se le ha dado a la urbe
y que se le sigue dando, son dignas de admirar. Dicen que la
Ciudad transmite paz y que es tranquila. Desde la Casa de
los Dragones, a la catedral o a la Basílica, todos se
marchan “gratamente sorprendidos”.
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