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Moreno Naranjo, miembro del comité ejecutivo del Consejo
Superior de Cámaras, acudió este viernes a la cita que el
organismo tenía con una delegación de la Comisión de
Comercio Internacional del Parlamento Europeo. En el
transcurso de este encuentro intervino el presidente de la
Cámara de Ceuta para exponer lo que significaría una Aduana
Comercial en la ciudad. Una exposición que concluyó con la
entrega de un informe, en español e inglés, sobre la
necesidad de su implantación en el Tarajal.
El presidente de la Cámara de Comercio, Industria y
Navegación de Ceuta, Luís Moreno Naranjo, a la sazón miembro
del comité ejecutivo del Consejo Superior de Cámaras de
España ha tenindo la oportunidad de defender la idoneidad de
la instauración de una Aduana Comercial en Ceuta ante una
representación de de la Comisión de Comercio Internacional
del Parlamento Europeo que ayer viernes visitó Madrid para
mantener un encuentro con la representación de las Cámaras
del país.
Moreno, en el transcurso de esta reunión celebrada en la
sede del organismo cameral español, tuvo la oportunidad de
intervenir para hacer valer la idea de la instauración de
una necesaria aduana comercial en Ceuta. Para ello y para
reforzar su tesis, Moreno hizo entrega de un informe -en
español e inglés- a cada uno de los miembros de la
delegación europea que asistió al encuentro de Madrid.
El Informe entregado
El documento que hizo entrega el presidente de la Cámara
ceutí cuenta con el siguiente contenido:
“La Ciudad de Ceuta, que es frontera sur de Europa, tiene
una larguísima tradición comercial que viene desde tiempos
de los fenicios.
En el último siglo el comercio ha constituido un poderoso
motor de desarrollo económico de la Ciudad. Esto ha sido
posible gracias a las especiales condiciones administrativas
de las que se dotó a la ciudad, para que pudiera subsistir
en una época difícil como fue la transcurrida en la última
mitad del siglo XX.
Existe un consenso claro y uniforme en la ciudadanía para
que se establezca una Aduana Comercial en Ceuta como
alternativa para la viabilidad económica de la Ciudad.
Un buen antecedente en lo relativo al establecimiento de una
aduana lo tenemos en el caso del desbloqueo de la llamada
verja de Gibraltar, que desde que se produjo esa apertura,
no ha dejado de crecer económicamente de forma muy clara e
indiscutible.
Las exportaciones “irregulares” de Ceuta hacia Marruecos se
calculan en unos 600 millones de euros anuales. Es necesaria
la implantación de una Aduana Comercial que regularice los
flujos y transacciones comerciales con Marruecos, lo que
permitiría una mayor penetración comercial en dicho país,
dado el conocimiento adquirido a lo largo de los años de
relaciones comerciales, así como de las peculiaridades del
mercado marroquí y sus características.
La implantación de dicha Aduana Comercial en la frontera de
“El Tarajal” en Ceuta, no solo tendría una importancia
esencial en el tejido empresarial ceutí y para el conjunto
de su población, sino que también contribuiría de forma muy
positiva a la reconversión del conjunto de los puestos de
trabajo sin cualificación, de la zona norte de Marruecos,
integrado por los porteadores de mercancías de dicho país,
en puestos de trabajo estables y dignos, dotando a su
población de una mayor cualificación, lo que beneficiaría
tanto a los empresarios como a los habitantes del otro lado
de la frontera.
Además, permitiría un control de los flujos de mercancías y
de la naturaleza de las mismas que entran y salen de ambos
lados de la frontera. Sin olvidar los motivos de seguridad,
que para las personas que se dedican a las tareas del
transporte supondría, ya que recientemente se han producido
unos desagradables incidentes (avalanchas, accidentes,
heridos, etc.) a la hora de trasladar la mercancía de España
a Marruecos, con desenlaces fatales para estas personas.
Marruecos podría establecer por supuesto, los mecanismos que
le permitan, por vía arancelaria, recaudar lo que
establezcan sus normas legales en materia de importación.
Además se da la circunstancia de que las Ciudades de Ceuta y
Melilla poseen las mismas condiciones jurídicas frente a la
UE en materia de Unión Aduanera, y sin embargo Melilla
cuenta con una Aduana Comercial que regula los tráficos
desde hace tiempo y hasta la fecha, con normalidad.
La petición de una Aduana Comercial para Ceuta, se ha hecho
en reiteradas ocasiones a la Cámara Oficial de Comercio,
Industria y Navegación de Ceuta, acompañada por el
Presidente de la Ciudad y el Delegado del Gobierno, al
Ministro de Asuntos Exteriores; al Vicepresidente tercero
del Gobierno y ministro de Cooperación Territorial, Manuel
Chaves, en su visita a Ceuta; al Presidente del Gobierno, en
dos ocasiones, en su visita a Ceuta; al Consejero de
Economía de la Ciudad de Ceuta, se lo solicitó al Ministro
de Industria, Comercio y Turismo, y al Vicepresidente de la
Ciudad de Ceuta, en la Conferencia de Asuntos Europeos, a la
Vicepresidenta del Gobierno de España.
La situación actual constituye una buena oportunidad para
conseguir esta normalización aduanera, ya que las relaciones
internacionales entre los dos países son excelentes, gozando
de proximidad política, fluidez y acercamiento. La idoneidad
del momento la completa la próxima presidencia de España del
Consejo de la Unión Europea para el primer semestre de 2010.
En el mismo sentido aboga el Estatuto avanzado de Marruecos
con la UE (firmado el 13 de Octubre de 2008) en el que se
declara la intención conjunta de un “reforzamiento de las
relaciones bilaterales/estatuto avanzado”, casi próximo a la
adhesión. Culminando esta relación en una Política Europea
de Vecindad (PEV) y un Plan de Acción de Vecindad
UE-Marruecos (PAV), en los que se deben establecer acuerdos
de libre comercio, la agricultura, servicios, etc.
Esta declaración constituye una verdadera hoja de ruta para
aproximar Marruecos a la UE, en una estrategia de
convergencia real de ambas zonas. Para ello se destinan
recursos financieros muy importantes que Marruecos debería
utilizar para crear la estructura técnica necesaria. Como
ejemplo se pueden señalar que determinadas ayudas de la UE
están condicionadas a su real contribución al desarrollo de
ambas zonas y a la participación de Marruecos en su
ejecución, circunstancias que deben estar presentes en el
diseño y el destino de los fondos que se arbitren para este
fin.
Algunos estudios demuestran que el desarme arancelario de
Marruecos afectaría de forma importante a la economía de
Ceuta que, por su proximidad, será desde el principio muy
beneficiada por el desarrollo de este país.
Por último cabe citar un estudio realizado por la Cátedra de
Economía Aplicada de la Universidad de Murcia, que establece
que el 70% de las mercancías que entran en Ceuta, en su gran
mayoría destinadas a Marruecos, son de origen español y el
16% del resto de países europeos. El beneficio de la medida
afectaría pues en un 86% a los productos de origen europeo.
En la misma línea argumental se ha manifestado la Presidenta
de la Cámara de Comercio de Melilla que apuesta por el
reforzamiento bilateral de las relaciones entre Marruecos y
UE, preconizando la integración del acervo comunitario en su
legislación, aunque no sea un país miembro de la UE.
Leyendo las recomendaciones de otros investigadores de las
relaciones entre nuestro país y el Magreb, cabe citar
también a Miguel Ángel Pérez Castro, que igualmente apuesta
“por –la necesidad de desarrollar- el comercio como
principal fuente de riqueza en estos territorios, pero
cambiando las condiciones en las que opera, pasando
gradualmente de un modelo de comercio no documentado, a ser
fronteras de la Unión Aduanera”, extremo este que se
conseguiría con el establecimiento de una Aduana Comercial
regulada. También sugiere que nuestra posición como
operadores económicos debería ser “Proactiva” (adelantarse
al cambio de circunstancias).
Por todo lo expuesto consideramos que la implantación de la
Aduana Comercial en Ceuta es una necesidad urgente y
prioritaria, no solo para Ceuta, sino para el conjunto de la
Unión Europea.
La Cámara de Comercio de Ceuta, solicita por ello la
colaboración de la Comisión de Comercio Internacional (INTA)
del Parlamento Europeo, con objeto de crear las condiciones
necesarias por parte de la Unión Europea, para promover el
establecimiento de una Aduana Comercial de pleno derecho por
parte de Marruecos, que permita el tránsito de mercancías en
ambos sentidos, como ocurre con Melilla, lo que favorecería
el paso de camiones entre Europa y Marruecos, facilitando la
reactivación de la economía a ambos lados de la frontera”.
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