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					Dice que todo lo que sabe se lo debe a la educación, 
					quizá por ello dedica su vida a investigar una ciencia en la 
					que las mujeres han tenido que pelear mucho para reivindicar 
					su posición, equiparar salarios y demostrar que enseñar es 
					cosa de todos. Almeriense conversa afincada en Granada, 
					Bollarín ha dedicado su proyecto de investigación a ver la 
					contribución de las maestras a la educación y descubrió así 
					infinitas historias que le han ayudado a seguir escribiendo 
					la historia rescatándolas de viejos documentos. La 
					catedrática de la Universidad de Granada a puesta por 
					rescatar la memoria, porque “reconociendo que tenemos un 
					pasado podemos seguir construyéndo un futuro mejor”.
 Pregunta.- Centra su ponencia en las predecesoras en el 
					magisterio. ¿Ha variado mucho el papel de la maestra de 
					entonces al de la de ahora?
 
 Respuesta.- Desde las primeras maestras hasta crear una 
					identidad profesional imaginese los pasos que se han dado. A 
					veces se piensa que el magisterio es como lo entendemos 
					ahora y es una larga historia en la que las profesoras han 
					hecho mucho camino. Las primeras maestras profesionales 
					surgen al mismo tiempo que se crea el sistema educativo en 
					España, en 1857. Y sólo a partir de ahí empiezan a 
					incorporarse como profesionales en un mundo hasta entonces 
					de hombres. Se reconoce una identidad profesional y se da un 
					paso increíble.
 
 P.- ¿Res pondían a algún perfil concreto aquellas 
					mujeres?
 
 R.- No son el modelo que se tiene desde instancias oficiales 
					o leyes. Las definían como buenas, dulces, cariñosas...pero 
					cuando se ven sus trayectorias profesionales se observa que 
					hay mucha diversidad pero que son por lo general unas 
					mujeres muy activas, muy dolentes, muy tenaces, que se 
					movieron mucho buscando su desarrollo profesional, que 
					escriben mucho y gracias a ello hemos podido ir 
					rescatándolas a todas. Cuando nos hemos puesto a querer 
					hacer historia hemos visto que apenas había información y lo 
					que hay, es gracias a ellas.
 
 P.- ¿Siente predilección por alguna en especial?
 
 R.- Por muchas...por todas...Una excepcional es Carmen de 
					Burgos, reconocida por su trabajo literario porque además de 
					maestra se pasó la vida viajando, la primera reportera de 
					guerra, corresponsal... es una mujer eminentemente 
					educadora, pero no con las aulas como el mejor espacio para 
					desarrollar su labor. Carmen de Burgos cree que la prensa es 
					la cátedra de la educación y tiene muy claro que es 
					importante educar a las mujeres a través de la prensa. A 
					partir de títulos frívolos mete caña durante toda su vida 
					con temas polémicos.
 
 P.- En general se piensa que la lucha ya se ha vencido y 
					vivimos en igualdad también en las aulas. ¿Qué cree?
 
 R.- La lucha continúa, pero si hay un modelo detrás de estas 
					maestras, algo que quiero rescatar. Se trata de rescatar la 
					memoria. Es importante que reconozcamos que tenemos un 
					pasado, algo que nos permite seguir avanzando y tenemos unos 
					modelos muy ricos: hay cosas que se vienen reivindicando 
					desde el siglo XIX y que todavía siguen siendo objeto de 
					reclamo. Ya en 1832 en España las mujeres consiguen una 
					igualdad económica entre maestros y maestras, algo inusual 
					en un contexto en el que la desigualdad salarial era la 
					norma. Tomaron conciencia de esa discriminación y se dieron 
					cuenta de que estaban en esa situación no porque fueran 
					menos capaces sino por el hecho de ser mujeres.
 
 P.- ¿Cree que hubo alguna época dorada en la educación en 
					España?
 
 R.- Sin duda el primer tercio del siglo XX. Vamos a celebrar 
					centro de nada el centenario de la supresión de barreras de 
					la libre entrada a las universidades.
 
 P.- ¿Se educaba mejor antes que ahora?
 
 R.- Siempre hay gente que lo hace lo mejor que sabe y se ha 
					hecho bien antes, también ahora y había gente que lo hací 
					amuy mal ante sy muy mal ahora. Las cosas hay que cambiarlas 
					porque se estropean, no porque sean viejas o nuevas y los 
					sistemas educativos deben ir enfocados así.
 
 P.- ¿Qué valor destaca de aquellas mujeres que puede 
					ayudarnos a educar hoy día?
 
 R.- Sin duda la tenacidad.
 
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