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La marcha de Pedro Gordillo de la dirección de la empresa
municipal Aparcamientos y Gestión Vial de Ceuta (Amgevicesa)
ha dado lugar a movimientos sindicales que han enfrentado a
Comisiones Obreras (CCOO) y la Unión General de Trabajadores
(UGT) con la Central Sindical Independiente y de
Funcionarios (CSI.F), que ha anunciado que acudirá a los
tribunales tras ver revocados sus cargos de representación
en el Comité de Empresa en una reunión de dicho órgano que
consideran ilegal.
Amgevicesa tiene desde el lunes nuevo presidente y
secretario en su Comité de Empresa, Miguel Ángel Duarte
(UGT) y Miguel Ángel Fuentes (CCOO), hasta que los
tribunales se pronuncien ante la demanda que en los próximos
días presentará CSI.F, sindicato que hasta ahora ostentaba
ambos cargos en dicho órgano de representación de los
trabajadores de la sociedad municipal.
El enfrentamiento entre unos y otros radica en la legalidad
de la convocatoria del Comité de Empresa: mientras para
CSI.F sólo ellos podían reunir al órgano, CCOO y UGT
argumentan que la mayoría de delegados del Comité pidieron
su convocatoria.
Sea legal o no la convocatoria, lo cierto es que a ambas
centrales sindicales les valieron sus delegados en el Comité
de Empresa –cuatro de CCOO y uno de UGT por cuatro de CSI.F–
para revocar el Reglamento, aprobar uno nuevo y renovar los
cargos de presidente y secretario en el órgano de
representación de los trabajadores.
El nuevo presidente del Comité de Empresa indicó ayer en
declaraciones a EL PUEBLO que el órgano “se regirá por todo
lo que marque y establezca la legalidad” y añadió que la
marcha de Gordillo y la llegada de Francisco Márquez como
máximo responsable de Amgevicesa “no hace ni más fácil ni
más difícil las relaciones entre la sociedad y los
sindicatos, cada uno tendrá su punto de vista, como pasaba
anteriormente”.
Por su parte, CSI.F ha decidido acudir a los tribunales para
que “por tercera vez consecutiva sea un juez el que meta
estas cabras en el corral”, señaló el sindicato en un
durísimo comunicado a los medios de comunicación.
CSI.F asegura que los medios utilizados para revocar los
cargos de presidente y secretario del Comité son “ilícitos y
absurdos” y que se han usado para ello “armas de guerra
sucia, aunque esto no debería sorprendernos, ya que no saben
actuar de otra manera”.
Según CSI.F, a pesar de existir un Reglamento del Comité de
Empresa “que establece claramente que el presidente es quien
convoca las reuniones ordinarias y extraordinarias, a los
delegados de CCOO y UGT les da igual, porque ellos tienen la
suficiente autoestima para creerse superiores a las normas”.
CSI.F señala además que “son tan inocentes que levantan acta
y la firman los cinco magníficos” y que “para rematar la
faena, los delegadillos de estas dos centrales sindicales
envían las decisiones que han tomado a la empresa, suponemos
para que todos seamos conocedores de su incompetencia e
ignorancia”.
La central sindical asegura que el Reglamente establece
claramente no sólo que el presidente del Comité de Empresa
es el que debe convocar las reuniones, sino que los cargos
de representación sólo pueden ser revocados por el conjunto
de los trabajadores en una asamblea.
CSI.F afirma que en dos ocasiones anteriores los juzgados de
Ceuta y las instancias superiores de Sevilla dieron la razón
al sindicato por el mismo motivo.
El ugetista Miguel Ángel Duarte relató, por su parte, que
los cinco delegados de su sindicato y de CCOO pidieron una
reunión al presidente del Comité de Empresa y que pasaron 14
días sin contestación, “cuando tienen la obligación de
responder en 10 días”, por lo que se convocó al órgano,
“pero los delegados de CSI.F no quisieron darse por
enterados y no acudieron”, lamentó.
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