| 
                     Desde el próximo lunes se va a 
					restablecer el suministro de agua, durante las 24 horas del 
					día. No sé como se puede explicar esto, pero hay algo más, y 
					es que el buque aljibe que venía rotando entre Algeciras y 
					Ceuta, dejará de hacerlo el martes de la próxima semana, y 
					en caso de que volviera a rotar, dependiendo de carencia o 
					escasez de agua, lo haría el próximo mes de enero. 
					 
					Y no es que la portavoz del Gobierno, Yolanda Bel, o el 
					Gobierno en pleno, hayan hecho la multiplicación de las 
					fuentes, arroyos y manantiales, como hizo Cristo con los 
					panes y los peces. No es eso, es que como era público y 
					notorio, había más de una fuga de agua, por donde escapaban, 
					a lo largo de las 24 horas del día, grandes cantidades, que 
					al final se había notado, de lo lindo. 
					 
					Ahora mismo, pues, con el agua que se ha traído en el buque 
					aljibe, con la reparación de esas fugas, con los cortes 
					desde las 12 de la noche, hasta las 6 de la madrugada, y con 
					lo poco, poquísimo, que ha llovido, se ha logrado mantener 
					unos 400.000 metros cúbicos, que bien distribuidos van a 
					servir para, de momento, evitar esas restricciones que 
					había, desde hace algo más de un mes. 
					 
					¿Y si sigue sin llover?. Habrá que esperar y confiar en que 
					lloverá un día, aunque, de momento, no parece que las 
					predicciones apunten a muchas lluvias, cuando menos, en 
					estos días venideros, luego ya veremos. A corto plazo, es 
					cierto, no parece que vaya a llover, sin embargo, estamos en 
					una época en la que es muy posible que comiencen las 
					lluvias, en abundancia, con lo que todo se solucionaría, 
					antes de lo que se espera, pero si para enero las 
					precipitaciones no han llegado, si entonces seguimos con la 
					sequía que se viene prologando desde hace tanto tiempo, 
					entonces, el Gobierno ya decidirá si licita o no la 
					contratación de un nuevo buque aljibe, cosa que implicaría 
					una nueva sangría, y no de las menores, para las arcas 
					municipales. 
					 
					Al hacer una valoración, sin partidismo de ningún tipo, creo 
					que el éxito o casi éxito de la recuperación de la 
					situación, para mejor, ha estado en la limitación del 
					suministro, durante la madrugada, con lo que se redujo, 
					considerablemente, el consumo de agua diario en la Ciudad. 
					 
					No había muchas más alternativas posibles que las que se 
					tomaron, para hacer frente a esa prolongada ausencia de 
					precipitaciones, a lo que se unía la disminución en las 
					aportaciones de los manantiales que vienen desde Beliones. 
					 
					De la desaladora no se dice ni palabra, no sé a qué viene 
					ese misterioso silencio, cuando sí se habla de que Ceuta 
					cuenta con dos pantanos que, estando totalmente llenos, no 
					pueden proporcionar un abastecimiento a la población durante 
					más de ocho meses y medio, frente a los varios años que 
					suelen aportar ese suministro algunos de los pantanos de la 
					Península. 
					 
					Así pues, de momento, y desde el próximo martes, el Sichem 
					Orchilds que la Ciudad contrató en octubre, por vía de 
					emergencia, para resolver aquella situación que empezaba a 
					ser, hasta cierto punto, alarmante ya, nos dejará de visitar 
					en el casi comienzo de la semana, o poco más. 
					 
					Y es que es el martes, cuando vence el contrato original, 
					que se prorrogó, cuando se había cumplido el primer mes, 
					durante otras dos semanas más. 
					 
					Desde la Ciudad Autónoma, y no es por fastidiar, no se 
					piensa en que toque la lotería o que se canten muchos 
					villancicos, se pide que llueva, cuanto antes y cuanto más 
					mejor. 
   |